Feijóo, en Valladolid: "El PP sin complejos ha vuelto”

En este acto dentro de su campaña hacia la Presidencia del partido, que concluirá con su proclamación en el Congreso Extraordinario que se celebra en Sevilla los días 1 y 2 de abril, Feijóo aseguró que ese Partido Popular aspira a una mayoría en torno a sus siglas para que sean “punto de encuentro” de aquellos que “defienden la unidad y la pluralidad de España, el idioma común y el conjunto de lenguas que cohabitan”, así como de las personas que “creen que la economía no es gastar sino invertir”, frente a un Gobierno de España actual con el que “la mayoría se siente incómoda”.

“Creo que la política de nuestro país debe recuperar la centralidad”, reiteró Feijóo, dado que esta busca “resolver la mayoría de los problemas de la mayoría de los ciudadanos” en torno a una educación “en equidad y libertad” porque de ella se deriva “el empleo y el crecimiento económico” con el que se construyen hospitales e infraestructuras para “ensanchar el bienestar de un país”.

Es por ello que el líder gallego pidió “no perder el tiempo en debates estériles y en enfrentar a los ciudadanos”, sino en unirlos para “un objetivo común” como es mejorar “el mejor país para nacer, crecer y vivir” en relación a España, que cuenta con “un potencial económico que desconocemos, una de las mejores sanidades públicas del mundo, un sistema educativo con márgenes de mejora pero que ha construido una sociedad formada, y empresas, emprendedores y empresarios de los que no nos podemos avergonzar”, algo que calificó como “ridículo” en relación al actual Gobierno del país.

Precisamente por ese Ejecutivo recordó Feijóo que España “necesita más que nunca” al Partido Popular al situarse ahora como “el país con mayor inflación de la Unión Europea, uno de los países con mayor deuda y un déficit desbocado” que hace que las generaciones actuales estén “viviendo a cuenta de nuestros hijos” por un Gobierno que “está gastando lo que no tenemos”.

Frente a ello, se puso Feijóo “a disposición del país” para ser elegido como nuevo referente del Partido Popular ofreciendo un proyecto “centrado en las reformas de la economía y los servicios públicos” a través de un “equipo solvente y preparado” y con un liderazgo basado en sus años de “experiencia, balance, aciertos y errores”.

Mejor que en Castilla y León

En la sala de cámara del Centro Cultural Miguel Delibes de Valladolid, ante un millar de personas, Feijóo también recordó su presencia en cuatro mítines durante la última campaña electoral por las elecciones autonómicas agradeciendo las “muestras de cariño enormes” recibidas durante unas últimas semanas de “enorme intensidad” no solo por los comicios sino por la “intensa crisis” de su formación a nivel nacional y la celebración del propio Congreso autonómico del PP.

Pidió en ese sentido el voto para su candidatura de los castellanos y leoneses asegurando, en todo caso, que no se conforma “con el resultado electoral” de las elecciones autonómicas porque el candidato a la Presidencia de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, “merecía un mejor resultado”, y pidió por ello un mayor apoyo a nivel nacional para tener “una mayoría indiscutible” que otorgue al PP el Gobierno de España obteniendo “más que todos los votos de los otros juntos”.

“Debemos exigirnos más, trabajar más, sacar mejores resultados y ser capaces de convencer a la mayoría de los ciudadanos”, concluyó Feijóo, recordando el compromiso del Partido Popular con España y lanzando una última advertencia a los presentes: “Fiaros de aquellos que no cambian su discurso cada 15 días, sino que lo perfeccionan cada vez que lo pronuncian”.

"Incluso dicen que soy moderado”

Utilizó la ironía en ese momento Feijóo para recordar las “muchas cosas” que se han dicho de él desde que decidió presentar su candidatura a la Presidencia del PP: “Que si soy filonacionalista, centralista furibundo, radical, de izquierdas e incluso me han dicho que soy un moderado”, señaló ante las risas de los presentes, afirmando que si le insultan es “porque creen que podemos ganarles”.

Por ello reivindicó sus “creencia en la gestión” para liderar el PP, no pretendiendo ser “un líder en la oratoria, sino en que cuando acabe nuestro mandato, las cosas estén mejor que cuando ha empezado”. Y es que consideró Feijóo que la política no debe ser “un concurso de popularidad” dado que “el principal fin es desgastarse tomando decisiones para dejar un mejor país”.

Por ello, apeló de nuevo a una política que apele “a las mayorías” porque el Gobierno “ha de serlo” y su presidente “no tiene legitimidad para dividir a los españoles y fracturar a la sociedad en base a minorías polarizadas que se impongan a las mayorías sosegadas” ni debe creer “en discursos identitarios ni en personas superiores a los demás”, ya que “no tiene que tener más derechos el que tiene más, pero tampoco se le puede señalar por la calle por haber trabajado más”.