La consejera de Sanidad, Verónica Casado, advirtió ayer de que el sistema sanitario da “signos de envejecimiento” y subrayó que “no hacer nada sería irresponsable”, por lo que planteó una serie de medidas con el objetivo de mejorar la calidad, mantener la equidad y organización de los profesionales.

En su comparecencia, que abrió el balance de los consejeros en las Cortes para exponer un balance de la legislatura, Casado manifestó que la atención primaria es el eje del sistema y aseguró que ha sido “el dique de contención” durante la pandemia, ya que en 2020 atendió a más de 23 millones de consultas y más de 13 millones en lo que va de año. Casado detalló que el 60% de sus recursos están en el medio rural y el 40% en los centros urbanos.

La consejera se remitió a las recomendaciones de los expertos de los grupos creados por la Consejería y los nombrados por los grupos de las Cortes en las que se coincide en una reordenación, cuyo objetivo, como explicó, es que cada paciente conozca el nombre y apellido de su médico y enfermera y no que cada vez le vea uno. Por eso, apostó por aumentar la calidad de la asistencia, elevar la inversión hasta el 20% del presupuesto dedicado a Atención Primaria, crear más de 1.500 puestos de trabajo en el sistema sanitario y aumentar la equidad en el acceso a la atención sanitaria en situación de requerimiento urgente de atención, especialmente en zonas con alta despoblación.

Unas medidas que han evitado más ingresos y fallecidos

La consejera de Sanidad, Verónica Casado, defendió ayer el “efecto positivo” de las medidas sanitarias y no sanitarias adoptadas en esta “durísima pandemia”, que han condicionado los proyectos de la legislatura, pero aseguró que una vez que remita se avanzará en reformas necesarias, como en la reorganización de la Atención Primaria.

En su comparecencia, que abrió el balance de los consejeros en las Cortes para exponer un balance de la legislatura, realizó un repaso de la evolución del virus en las distintas olas, cada una con “sus características”. La consejera aseguró que el COVID ha sido un reto porque se han visto las debilidades y fortalezas del sistema, que en ningún momento llegó a colapsar pese a la presión asistencial en los momentos de mayor incidencia e ingresos, si bien indicó que ha sido una oportunidad para avanzar.

En su repaso de la pandemia que “ha causado tanto dolor”, explicó que la primera fue “la más agresiva” de una enfermedad desconocida en la que hubo 64.000 infectados, 7.496 personas ingresadas, 547 en las UCI y 1914 fallecidos en los hospitales. Casado afirmó que la creación de los planes de contingencia y de una área única Castilla y León, el comité de expertos para asesorar a la Junta e informar a la población, que fue “una obsesión” de la Junta, fueron medidas clave, aunque advirtió además que si no se reforman las actuales “herramientas obsoletas” supondrá que “no se ha aprendido nada”

El ritmo de contagios por COVID sigue a la baja en la comunidad; 262 nuevos positivos

El ritmo de contagios de COVID-19 continúa a la baja en Castilla y León en los últimos días y ayer viernes también, ya que la comunidad notificó 262 nuevos casos, 84 menos que el jueves y un 38,1% menos que el pasado viernes, cuando se comunicaron 424 casos. Pese a ello, la región ha notificado cuatro nuevos fallecimientos por coronavirus en sus hospitales, dos en Salamanca y el mismo número en León. De acuerdo con los últimos datos facilitados por la Consejería de Sanidad y recogidos por Ical, de los nuevos casos, un total de 196 tienen diagnóstico el día previo. Zamora se sitúa en cabeza con 55 casos, por delante de Burgos, con 53; Valladolid, con 45; Salamanca, con 35; León, con 27, y Ávila con 26. En Soria se contabilizaron cinco nuevos contagios y ocho en Palencia y Segovia. En cuanto a los brotes activos, su número baja hasta los 349, frente a los 364 del jueves con 2.297 casos vinculados, 50 menos. El mayor volumen de brotes activos se encuentra en Salamanca con 76 (449 casos activos vinculados) y en Valladolid con 59 (470). A continuación aparece León, con 43 (296 casos);, Ávila con 38 (258); Burgos, con 33 (274); Zamora, con 33 (271); Segovia con 31 (121), Soria con 19 (92) y Palencia con 17 (66).