La pensión media se situó en Castilla y León a 1 de diciembre de 2020 en 1.010,10 euros, una cantidad inferior a la media del conjunto de España, que alcanzó 1.017,97 euros, tras una subida del 2,55 por ciento respecto al mismo periodo del año precedente, incremento que a nivel nacional fue de tres décimas menos, con un 2,23 por ciento, según los datos hechos públicos hoy por el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones y recogidos por la Agencia Ical.

El número de pensiones en la comunidad cae un 0,62 por ciento en tasa interanual, hasta las 612.485. Del total, el 63,7 por ciento (390.240) corresponde a jubilación, con una pensión media que asciende a 1.157,78 euros. Por incapacidad permanente son 46.548 pensiones (983,34 euros); por viudedad, 152.551 (722,16 euros); por orfandad, 19.294 (444,99 euros); y en favor de familiares, 3.852 (605,99 euros).

Por provincias, la pensión media más alta se registra en Valladolid, con 1.130,86 euros; seguida de Burgos, con 1.083,57 euros. Le siguen Palencia (1.034,51 euros); León (1.004,67 euros); Soria (957,29 euros); Segovia (956,72 euros); y Salamanca (940,74 euros). Por debajo de los 900 euros de pensión media se encuentran la provincia de Ávila (886,01 euros) y Zamora (853,53 euros).

En cuanto al número de pensiones, León figura a la cabeza, con 140.711, por delante de Valladolid (115.582). Le siguen Burgos (90.609), Salamanca (80.377), Zamora (48.159), Palencia (42.509), Ávila (38.699), Segovia (33.572) y Soria (22.267).

Pensiones contributivas en Castilla y León. Ical

Por comunidades, la pensión media más alta se encuentra en el País Vasco (1.263,8 euros), seguida por Asturias (1.198,5 euros) y Madrid (1.195,7 euros). También Aragón (1.073,3), Cantabria (1.075,3), Cataluña (1.056) y Navarra (1.170,4) cuentan con pensiones por encima de la media nacional. Por el contrario, las más bajas se registran en Extremadura (847,6); Galicia (865,9) y Murcia (898 euros).

La nómina mensual de las prestaciones contributivas de la Seguridad Social ascendió a 9.985,26 millones de euros a 1 de diciembre, un 2,3 por ciento más que hace un año. Más de dos tercios de la nómina, 7.168,76 millones de euros, se destinó al abono de las pensiones de jubilación. Esta cuantía supuso un crecimiento del 2,9 por ciento en los últimos doce meses.

La nómina de las pensiones de viudedad fue de 1.716,6 millones de euros, un 1,4 por ciento más que hace un año. La de las prestaciones por incapacidad permanente, por su parte, se situó en 934,83 millones de euros (-0,6 por ciento), mientras que la de orfandad supuso 138,48 millones (1,1 por ciento) y las prestaciones en favor de familiares, 25,59 millones de euros (2,3 por ciento).

De las 9.809.019 pensiones contributivas abonadas a 1 de diciembre (0,08 por ciento más que hace un año), 6.125.792 son de jubilación; 2.352.738, de viudedad, 948.917 de incapacidad permanente, 338.540 de orfandad y 43.038 en favor de familiares.