El Colegio Oficial de Ingenieros Agrónomos de Castilla y León y Cantabria reclaman a la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) que eleve la capacidad de regulación un 12% para garantizar el abastecimiento a las zonas regables. Los ingenieros agrónomos apuestan además por un proceso de modernización del regadío que permita una ahorro de agua de entre el 25 y el 30%.

El colectivo traslada su propuesta a través de sus alegaciones al “Esquema Provisional de temas importantes de la parte española de la Demarcación Hidrográfica del Duero. Tercer ciclo de planificación hidrológica” para el periodo 2021-2027. En este sentido, defiende que actuar así “consolidará la actividad en la zona rural y por lo tanto la presencia de población en la misma, asegurando la permanencia de jóvenes ligados a la actividad agraria que frenarán el problema de la despoblación”.

El Colegio Oficial de Ingenieros Agrónomos insiste en la necesidad de modernizar el regadío, impulsar la agricultura de precisión y consolidar el uso de las aguas subterráneas. Además, piden garantizar la “sostenibilidad de los regadíos incrementando la capacidad de regulación de la cuenca del Duero, que debería pasar del 31% actual al 42-45%, y así mitigar la reducción de aportaciones por el efecto del cambio climático”.

La organización remarca que la realidad del medio rural de Castilla y León se caracteriza por la existencia de pequeños núcleos de población, convertidos en comunidades rurales vulnerables que se enfrentan a dos problemas de “extraordinaria magnitud”, la despoblación y el desempleo. Al respecto, recuerda que el agua es “el principal factor limitante en la producción vegetal” de la comunidad y el regadío “elimina esas limitaciones” y permite unos cultivos más productivos. En este punto, los ingenieros agrónomos resaltan que este método obliga a una modernización “total”, que sin duda “resultará atractiva para los jóvenes”.