El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, trasladó ayer al ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, su apoyo y colaboración para programar un Plan Estratégico Nacional en la aplicación de la nueva PAC post 2020 y defendió que la comunidad mantenga al menos su actual financiación cercana a los 1.000 millones anuales.

Así se lo manifestó en la reunión celebrada ayer por la mañana en la sede de la Presidencia de la Junta, en la que explicó que Castilla y León comparte el planteamiento de tener un Plan Estratégico único para toda España donde se diseñe la aplicación de la nueva PAC en el conjunto del país, recogiendo las particularidades de la agricultura de los diferentes territorios.

Según la información ofrecida de este encuentro por la Dirección General de Comunicación, Castilla y León considera que la construcción de la nueva PAC, a través de este Plan Estratégico Nacional, tiene como objetivo fundamental que no se produzcan desequilibrios territoriales respecto a la situación actual, ya que ello provocaría abandono de la actividad en el medio rural, lo que supondría a su vez el fracaso de la propia PAC, única política europea territorial realmente dirigida a los territorios rurales, los más extensos y difíciles de proteger.

El presidente de la Junta recalcó además que es necesario garantizar la actual financiación procedente de la PAC y no disminuirla. Para Castilla y León la PAC supone unos 1.000 millones de euros al año, la mayor parte dirigida al apoyo a la renta de los agricultores y ganaderos y a mantener una producción sostenible con los recursos naturales.

Los enfoques de la nueva PAC serán más exigentes desde un punto de vista medioambiental, por lo que reducir la financiación pondría en riesgo la actividad agroalimentaria, la más importante en el medio rural, aseveró el líder regional.

Durante la reunión, el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, se mostró por su parte convencido de que el Gobierno sacará adelante unos presupuestos generales del Estado para el próximo año y que estos supondrán “una palanca” para el futuro del sector agrícola y ganadero y también del agroalimentario.

UN PROYECTO “A FAVOR DEL CAMPO” QUE “NO GENERE DESEQUILIBRIOS”

El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Jesús Julio Carnero, pidió ayer al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación la construcción de una Política Agraria Común (PAC) “a favor de los agricultores” y que no genere “desequilibrios” territoriales respecto a la situación actual. “Es el gran desafío que tenemos como Estado, como España y en ello estamos embarcados”, dijo.

Así lo declaró Carnero durante su participación en la undécima jornada de cooperativismo agrario “Una PAC para España: más allá del Brexit y de la COVID-19” en la que también estuvo presente el ministro Luis Planas. En su intervención, Carnero consideró que “el debate” sobre la PAC “no es sobre el dinero” sino sobre la distribución de esos fondos, por lo que insistió a la hora de favorecer que no se produzcan “desequilibrios territoriales”.

El consejero se refirió a la PAC como una herramienta “esencial” para Castilla y León ya que debería ser “una política de certezas” que dé “estabilidad”. También hizo alusión a la Política Agraria Común como una “política de futuro” para el sector agrícola y para los jóvenes como “forma de corregir las inestabilidades desde el punto de vista de precios y rentabilidad”, añadió. Pero aparte de todo ello, recalcó la necesidad de que sea “moderna y anclada en las raíces” y a la sostenibilidad económica y social a las que hizo referencia el ministro, Carnero añadió la sostenibilidad alimentaria “porque el COVID ha demostrado que somos esenciales”.