El consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Antonio Sáez Aguado, afirmó ayer que la solución de los problemas en la atención sanitaria de Castilla y León no depende de quién sea el consejero o la gerente de Atención Primaria. Ha respondido así en Burgos a las preguntas de los periodistas sobre el ultimátum de los coordinadores de centros de salud de Burgos, que han anunciado que dimitirán en bloque el lunes si la gerente, Aser Morato, sigue en su puesto; y las peticiones de dimisión del propio consejero planteadas por las plataformas por la sanidad pública de Castilla y León.

Ha insistido en que los problemas en Atención Primaria son las guardias urbanas y los desplazamientos en consultorios rurales, "que es lo que hay que tratar de resolver con el consenso y no con líneas que lo compliquen, porque no siempre están de acuerdo profesionales, usuarios y alcaldes".