La Junta de Castilla y León estima un crecimiento económico del 2,3 por ciento en 2019 en la comunidad y una desaceleración en la creación de empleo para dejar la tasa de paro entorno al 11,5 por ciento al final del ejercicio.

Así lo explicó la consejera de Economía y Hacienda, Pilar del Olmo, quien aseguró que se trata de una estimación "prudente" ante las "muchas incertidumbres" en el ámbito nacional, europeo y también mundial. En tal sentido, se refirió a que no se sabe si el Brexit (salida del Reino Unido de la Unión Europeo) será "duro o blando", a la ausencia de "seguridad" en las decisiones del Gobierno socialista y a la política arancelaria del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

La economía de Castilla y León se va a desacelerar el próximo año, con un crecimiento previsto del Producto Interior Bruto (PIB) entorno al 2,3 por ciento, precisó la consejera durante su comparecencia para explicar la operación de venta de suelo en el polígono de Ircio, en Miranda de Ebro.