La sanidad de Castilla y León impulsa una plataforma para sistematizar progresivamente el análisis de fondo de ojo en los centros de salud a los pacientes con diabetes, en conexión con los hospitales y el IOBA, para prevenir la retinopatía diabética y la ceguera que lleva aparejada. Se trata de generalizar ese cribado con los retinógrafos que ya operan en los centros de salud y que incluso podrían funcionar de forma móvil, lo mismo que ahora se hace con las mamografías, según ha explicó ayer hoy el consejero de Sanidad, Antonio Sáez, a la derecha de la fotografía.