El consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Alejandro Vázquez, ha afirmado en Zamora que las bajas de profesionales sanitarios, especialmente de enfermería, obligó a concentrar a todos los pacientes ingresados en una sola planta durante parte del pasado fin de semana. Fue esta contingencia, explicó, la que motivó que los pocos pacientes que había en la primera planta del centro hospitalario benaventano fueran trasladados a la tercera.

 “La Junta de Castilla y León y este consejero no van a quitar ningún servicio. Estamos en una situación de bajas laborales del personal sanitario hace que tengamos que concentrar plantillas de enfermería y juntar (los pacientes) de las plantas”, dijo. “No tenemos un número suficiente de enfermeras a pesar de que se han contratado casi dos mil profesionales. Son planes de contingencia para poder desarrollar la actividad”, agregó.

Vázquez aseguró que una decisión similar y motivada por parecidas circunstancias se había tenido que adoptar también el complejo hospitalario de León.