Son limitadas las actividades en las que los niños participan este curso escolar en Benavente debido a las restricciones impuestas por la pandemia, pero sí hay iniciativas que cuentan con gran atractivo por su disfrute al aire libre, como la actividad de pesca deportiva, en la que un grupo de niños han podido iniciarse gracias a la iniciativa realizada por el Club Deportivo de Pesca Benavente que ha realizado un cursillo en el que lo más importante es mostrar a los participantes el equilibrio entre competición y el respeto al medio ambiente. “Se trata de que los niños aprendan los beneficios del deporte de la pesca desde el enfoque del respeto a la naturaleza. Somos pescadores deportivos. Nos une con el pescador clásico de toda la vida la afición y la pasión por la pesca, pero nosotros siempre practicamos captura y suelta, no nos llevamos las piezas para casa”, explica el presidente del club, Jesús Villarino.
El lugar elegido para realizar este cursillo es el estanque del Prado de las Pavas, en un entorno ideal donde los benaventanos aprovechan prácticamente a diario a disfrutar de diferentes rincones al aire libre. Como ya es algo habitual en cada actividad que se realiza en el día a día, no faltaron mascarillas, gel higienizante y distancias de seguridad para cumplir con las medidas establecidas para evitar posibles contagios.
Lo primero que se enseña a los más pequeños es el respeto a la naturaleza. “Nosotros en lugar de dejar el rastro por donde vamos, tenemos como máxima que no se note que hemos pasado por allí y si podemos dejarlo mejor que estaba pues así lo haremos. El respeto a la naturaleza es la base. Estamos acostumbrados no solo a llevarnos nuestros residuos, sino los de otras personas menos consideradas”, añadió Villarino.
Hay distintas modalidades de pesca pero en este cursillo se han centrado en la pesca al coup. “Se realiza con caña telescópica que tiene un elástico y en la que se monta una línea y se pesca de modo fijo en un punto, de modo que durante la acción de pesca cebando el agua de modo continuado conseguimos que la pesca se reúna y que algún pez muerda el engaño”. Los participantes aprendieron cómo preparar la caña, montar el flotador, distintos tipos de cebo que hay y pudieron ponerlo en práctica. No faltaron las capturas, que fueron desanzueladas con sumo cuidado e inmediatamente devueltas al agua.
Este cursillo sirve de antesala al concurso que se celebrará mañana sábado en el mismo lugar y en el que la participación está exclusivamente reservada para socios del club menores de 12 años.
