Comienza la semana a la espera de conocer la decisión del CEOPI (Centro de Coordinación Operativa Integrada) respecto a posibles cribados masivos en la zona, tras analizar la situación epidemiológica de la pandemia ocasionada por el SARS-CoV-2. Los datos facilitados al Ayuntamiento de Benavente con relación a los casos positivos COVID suman un total de 76 durante la última semana sumando los 43 del lunes, tras el fin de semana sin ofrecer datos al respecto, 2 el martes, once más el miércoles, 13 el jueves y 7 el viernes. Una cifra que, por cierto, dista de la que ofrece la página web de la Junta de Castilla y León sobre la situación epidemiológica en este municipio y que para los últimos 7 días, en la jornada de ayer, cifraba los positivos en 53.
Atendiendo a la incidencia acumulada en los 14 días anteriores, en Benavente ha descendido hasta 815,20, una cifra que sería superior atendiendo a los datos que la Junta ha facilitado al Ayuntamiento. Mientras que la que se refiere a los últimos 7 días se sitúa, según la Junta, en 298 casos activos por cada 100.000 habitantes. Una cifra que no tranquiliza al alcalde de Benavente, Luciano Huerga, quien asegura que “está bajando esa incidencia gracias a las medidas de responsabilidad de los vecinos, porque han comprendido la gravedad de la situación, pero no porque se hayan tomado medidas preventivas reales por parte de las autoridades sanitarias de la Junta”. Para el alcalde, el nivel de incidencia sigue siendo preocupante y explica que “el hecho es que no podemos ni debemos confiarnos, porque el límite del nivel 4 es 500 y ese límite ya es una barbaridad”.
El alcalde señala que “para conseguir bajar la tasa de incidencia y los casos se deben tomar medidas proactivas por parte de los responsables de la Junta de Castilla y León, porque en la situación actual, y durante todo lo que llevamos de pandemia, que son 11 meses ya, hasta la fecha solo se han tomado medidas pasivas”.
Se refiere Huerga a iniciativas como “petición de responsabilidad, autoconfinamiento, cierres de actividades” pero, explica, “ninguna medida proactiva en nuestra ciudad y comarca. Insisto, estar en un nivel por encima de 800 casos es una barbaridad y no es para estar contentos ni confiados”.
Desde el Ayuntamiento de Benavente se sigue apostando por que en las zonas básicas de salud de Benavente se lleve a cabo un cribado masivo, como medida preventiva.
Señala el alcalde que “es necesario seguir haciendo hincapié en la responsabilidad de los ciudadanos pero también en la de las autoridades sanitarias para llevar a cabo esas medidas de control de la transmisión comunitaria como son los cribados”.
Y hace hincapié el primer edil de Benavente que “al final los únicos cribados que se van a hacer van a ser los comprometidos por la CEOE para trabajadores y realizados mediante la sanidad privada. Y eso creo que ya dice bastante. El resto de la población pues tendremos que dedicarnos a mirar al sol, o encomendarnos a algún santo”, lamentó Huerga.
Aunque la incidencia en Benavente ha descendido, no lo han hecho significativamente los datos de casos activos que se sitúan en 639 en las zonas básicas de salud de Benavente (352 en Benavente Sur y 141 en Benavente Norte), Santibáñez de Vidriales (23) y Camarzana de Tera (123).
En la comarca destaca la situación de la localidad de San Cristóbal de Entreviñas, cuya incidencia sigue subiendo. Los datos de ayer, entre los que no se incluyen los del fin de semana, reflejan una incidencia a 14 días de 1.753,10, mientras que en los últimos siete días la incidencia alcanza los 1.314,84 y 18 positivos por COVID en los últimos 7 días. Los brotes de contagios están localizados, según explicaba el Ayuntamiento la pasada semana, aunque no se descartan medidas para contener la transmisión como el cierre de algunos espacios públicos como el parque infantil o las pistas de pádel. Tampoco se descartan posibles cribados, pero es algo que determinará hoy el CECOPI.
No hay que olvidar, además, que en la provincia de Zamora, son dos los pueblos en los que se aplican las medidas excepcionalísimas establecidas por la Junta de Castilla y León para reforzar el nivel 4 de alerta por la pandemia. Se trata de dos pueblos de esta comarca, Barcial del Barco, que se mantiene con las medidas restrictivas, y Arcos de la Polvorosa que entraba el viernes en la lista de municipios de mayor riesgo.
