El Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León arrancará la próxima semana el proceso de concentración parcelaria y de modernización del riego del Canal del Esla, que afectará a casi una decena de municipios del sur de León y a otra media docena de la comarca, incluido Benavente.

4.000 regantes de ambas provincias están afectados por este ambicioso proyecto que combinará la concentración con la modernización del regadío, y que se desarrollará a lo largo de al menos cinco o seis años (esta es la media estimada de otros procesos similares) y afectará a unas 11.500 hectáreas de terrenos de cultivo. De estas, 4.090 se localizan en la ribera zamorana del Esla, entre Matilla de Arzón y Villanueva de Azoague.

Los ayuntamientos afectados aprobaron en Pleno en el verano de 2018 solicitar al Servicio Territorial de Agricultura la reconcentración de las parcelas. Unos meses antes, el 60% de lo regantes había votado a favor el proyecto de modernización.

La concentración y la modernización del riego se desarrollarán presumiblemente por sectores. Hasta ahora los ayuntamientos han conocido un anteproyecto del que emanará el proyecto definitivo. De los detalles del estudio técnico previo y del proceso hablarán técnicos del Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (Itacyl) el próximo día 10 en el auditorio del Centro de Negocios. A esta cita están convocados todos los afectados de la zona regable, tanto de León como de Zamora.

Aunque el proyecto final puede variar con respecto a las previsiones que se conocen hasta el momento, entre otros motivos por las alegaciones que se puedan plantear, el sistema de riego del canal del Esla a través de redes de acequias principales y secundarias, dejará paso a la construcción de una tubería soterrada a lo largo de la ribera leonesa y zamorana para garantizar el riego a menor coste que el actual. Esta tubería contará con una estación de bombeo en la zona de Villamañán y Algadefe para garantizar la presión del agua, y con sendas balsas reguladoras en Cimanes de la Vega y en el término municipal benaventano, según ha explicado en base a la información disponible actualmente el presidente de la comunidad de regantes del Esla, José Luis Cadenas.

Las balsas se usarán durante el día y se llenarán durante la noche. En las fincas de reemplazo está prevista la instalación de hidrantes cada cinco o seis hectáreas para posibilitar el riego por aspersión.

Los municipios ribereños de la comarca afectados por este doble proyecto son Matilla de Arzón, con 125 hectáreas; Santa Colomba de las Carabias (830); San Cristóbal de Entreviñas (1.425); Benavente (1.070), Castrogonzalo (295) y Villanueva de Azoague (345). Una parte de estas 4.090 hectáreas podrían quedar fuera de la reconcentración por diferentes motivos.