El consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Antonio María Sáez, ha calificado de buenos resultados los obtenidos con aplicación del Plan Regional de Cuidados Paliativos, entre cuyas unidades estaría la del Hospital de Benavente.

En declaraciones a la Agencia Ical, Sáez dice que este plan, que cuenta con una inversión de 60 millones de euros en cuatro años, "ha supuesto ya el nacimiento o ampliación de cuatro unidades de cuidados paliativos en Soria, Benavente, Zamora y Segovia, para lo que más de 500 profesionales han recibido formación avanzada".

La Consejería de Sanidad habilitó un cartel en la tercera planta del Hospital de Benavente en la que se puede leer Unidad de Cuidados Paliativos. Detrás del cartel hay varias habitaciones que en teoría estarían prestando este servicio. Tanto el personal del Hospital como el Movimiento para la Defensa de la Sanidad Pública siempre han mantenido que el servicio cómo tal no ha existido nunca. Los pacientes terminales ocupan habitaciones aisladas para contar con mayor intimidad personal y familiar pero son atendidos por los internistas del Hospital. Según estas fuentes, la situación no ha variado.

La Consejería ha anunciado ahora que la Junta de Castilla y León remitirá en enero a las Cortes regionales un proyecto de ley que creará la categoría de médicos de cuidados paliativos, que dejará en manos de estos profesionales la asistencia a pacientes con enfermedades terminales.