Las reticencias municipales para la puesta en marcha de la Mancomunidad de Interés General han estado presentes durante todo el proceso que por parte de los alcaldes que han dado un paso al frente no se entiende puesto que mostrar la voluntad de la constitución de esta Mancomunidad no supone ningún compromiso más, aunque sí permite optar a ayudas de la Administración regional que podrán destinar "a lo que queramos", desde inversiones a gastos generales.

"Hemos conseguido que más de un tercio de los municipios vean que es una entidad administrativa que lo que va a hacer es prestar más y mejores servicios a los ciudadanos. Ojalá se incorporen más a lo largo del proceso pero, de momento, tenemos el número de municipios y habitantes necesarios para que salga adelante", explicó el alcalde de Benavente. De las 14 mancomunidades que podrían crearse en Castilla y León van a constituirse siete y "vamos a estar en la cabecera de zonas".