El portavoz de la Unión del Pueblo Leonés, Pedro Angel Gallego, exigió ayer la dimisión de la concejala de Personal del Ayuntamiento de Benavente tras conocerse el «despido injusto» de dos trabajadoras municipales. Gallego, en un comunicado, aseguró que gracias a la «"hábil política de despidos"» de la Concejalía, las indemnizaciones fijadas en sentencia (unos 20.000 euros) le costará un euro a cada benaventano.

La formación leonesista denunció «las negativas consecuencias» derivadas de «las cuantiosas indemnizaciones que se van a tener que pagar del erario público local, es decir, del dinero de todos nosotros».

Dice UPL que mientras que el equipo de gobierno del PSOE «castiga a todos los benaventanos a una subida de impuestos sin precedentes, dilapida más de tres millones de pesetas en pagar indemnizaciones por una política de despidos que el Juzgado acaba de condenar por improcedente y contraria a los derechos de los trabajadores recogidos en la Constitución Española».

Gallego cree que es «palpable» la «nefasta» política que el Ayuntamiento está llevando a cabo con sus trabajadores, política que está afectando «negativamente a estos y a los ciudadanos». Entre los episodios que le llevan a esta conclusión cita la «presión a la Policía Local para que multe a más ciudadanos; la amenaza de movilizaciones por parte de los trabajadores por incumplimiento del Convenio Colectivo; la denuncia del Comité de Empresa al arquitecto municipal tras haberse ofrecido como mediador el señor alcalde y no haber hecho, al parecer, nada al respecto y, los dos despidos de trabajadores del Ayuntamiento que acaba de condenar el Juzgado».

UPL afirma que el equipo de gobierno mantiene abiertos varios expedientes a trabajadores municipales y le exige que informe a los ciudadanos «del número de trabajadores amenazados de sanción o despido en la actualidad, así como las causas que 1o fundamentan».