Estudiantes, profesionales, zamoranos que trabajan en Madrid e incluso algún político, como el número 3 de Génova y diputado por la provincia Fernando Martínez Maíllo conformaban el grueso de los aproximadamente 60 pasajeros que han estrenado el tren madrugador a Madrid que partía puntual a las 7.05 horas de la estación de Zamora.

El nuevo servicio recibía el aplauso unánime de los usuarios, ya que permite a mucha gente salir hacia Madrid por la mañana el lugar de hacerlo la tarde anterior. Personal de Renfe seguía atentamente este primer viaje, que tenía previsto recoger también una veintena de viajeros en Medina y otro centenar en la parada de Segovia, localidades que también se van a ver beneficiadas por el nuevo servicio ferroviario.

El dirigente popular agradeció al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna la sensibilidad para con Zamora con la puesta en marcha del servicio de primera hora, que tuvo que superar problemas de operativa técnica para hacerse por fin realidad. Un servicio que se completa con el de última hora, que regresa de Madrid una hora más tarde que el actual, es decir, a las ocho menos diez. Maíllo se felicitó por el éxito de la alta velocidad ferroviaria en Zamora, modelo, dijo, por el que siempre ha apostado el PP frente a las reticencias de otros partidos, como IU. "Es una muy buena noticia que tiene que completarse cuando la velocidad llegue a 350 kilómetros hora y se tarde una hora en llegar a Madrid. Hoy ya se puede vivir en Zamora y trabajar en Madrid".

El convoy era un tren de la serie 114, diferente por tanto a los Alvia que estamos acostumbrados a ver en Zamora capital, con tres coches. Los viajeros de Zamora ocupaban preferentemente las plazas de delante, mientras que las posteriores estaban reservadas para Medina y Segovia