Casi 200 turistas menos en El Puente de Sanabria, 400 en Puebla, 900 en Toro, 100 en Benavente y 700 en Zamora capital. Ese fue el desolador balance registrado en las Oficinas de Turismo de la provincia entre el Domingo de Ramos y el Domingo de Resurrección.

El mal tiempo, las vacaciones escolares y los elevados precios de alojamiento entre el 25 de marzo y el 1 de abril son algunos de los argumentos esgrimidos por los responsables turísticos, quienes también achacan el pronunciado descenso al denominado "efecto reparto" entre las numerosas ciudades que han logrado algún tipo de Declaración de Interés Turístico para sus respectivas semanas de Pasión.

Especialmente, la meteorología adversa se cebó con la comarca sanabresa, donde apenas 396 personas -el peor dato de los últimos cinco años- pasaron por la oficina de turismo de El Puente frente a las 577 que lo hicieron en 2017, lo que se traduce en una caída del 31%. Una brusca bajada que también se notó en Puebla aunque en menor medida, donde la diferencia entre los 1.728 turistas del pasado ejercicio y los 1.319 del presente año fue de un 23%.

La merma de visitantes también se dejó notar en Toro, con una disminución del 26%. Según los datos facilitados por la Diputación de Zamora, 2.524 usuarios demandaron información en la oficina local frente a los 3.443 de 2017, es decir, casi un millar menos, su peor cifra desde 2014.

En Benavente, más de lo mismo. La variación en negativo entre los demandantes de información de 2017 (430) y 2018 (333), fue del 22%.

Por su parte, la oficina del Patronato de Turismo en la capital, situada en la plaza de Viriato, recibió la visita de 5.603 personas, 748 menos que en el pasado ejercicio cuando fueron atendidas 6.351 (un 11% más). Pese a salir mejor parada que el resto, los datos reflejan una notable caída en el número de extranjeros. Y es que de los 5.603 forasteros, 4.535 fueron nacionales y solo 460 procedían de fuera de España. Es decir, menos de la mitad que el pasado año cuando la Semana Santa de Zamora atrajo a 943 extranjeros.

En concreto, 83 se acercaron desde Portugal, 70 de Francia y 59 de Alemania, entre otros países europeos, aunque también hubo cabida para otras nacionalidades más exóticas como la china (14), la australiana (8) o la canadiense (7). En cuanto al turismo estatal, los madrileños continuaron un año más siendo los más asiduos (1054), seguidos de los propios castellanoleoneses (745) y los valencianos (361), catalanes (355), vascos (354) y andaluces (351).

Además, según han constatado en los últimos años desde la sede de Viriato, los viajeros adelantan la fecha de regreso a sus casas al Sábado Santo en lugar del Domingo de Resurrección, quizá por evitar los dichosos atascos de tráfico, según apuntan desde la oficina de la capital.

La lectura por meses también arroja el mismo resultado. En marzo de 2018, Zamora recibió la grata visita de 9.654 personas. En abril de 2017, mes en el que se celebró la Semana Santa el pasado año, 10.479. Un sensible descenso a la semana de Pasión zamorana, la "gallina de los huevos de oro" de la ciudad y provincia.