El senador Javier Faúndez, defendió tanto la política sanitaria de la Junta de Castilla y León como su "sensibilidad" para escuchar los "problemas puntuales" que se presentan y resolverlos. Como argumento para defender la primera de las afirmaciones mencionó el barómetro sanitario "que no lo hace el PP" sino que se elabora con las encuestas que responden los ciudadanos y que otorgan una buena nota a la asistencia sanitaria. Para argumentar lo segundo, la sensibilidad de la Junta recurrió al ejemplo de su zona, Aliste, que ha vivido en primera persona como alcalde. Señaló que todos los regidores mantienen unas reivindicaciones comunes, que han sido expuestas a la Junta y la resolución de los problemas que van surgiendo cada día tiene un seguimiento por parte de la Delegación Territorial, con el fin de solventar todos los contratiempos.

El diputado nacional y presidente del partido, José María Barrios, fue, por su parte, el encargado de fijar la postura de la formación popular en torno al controvertido asunto de las macrogranjas, con un discurso que se aparta poco al que defiende la Junta de Castilla y León: no están ni a favor ni en contra, simplemente piden que se aplique la normativa, y si las granjas la cumplen, no hay ningún problema para que se instalen en Zamora.