Enrique Bonet es un museógrafo que atesora una trayectoria de más de veinte años. A lo largo de estos años ha participado en más de 150 proyectos expositivos y culturales para instituciones nacionales e internacionales que abarcan casi todos los campos del conocimiento desde la fotografía, a las artes visuales y escénicas, pasando por el grabado, la escultura, la literatura así como la ciencia y la biología, la indumentaria o la música, a tenor de la información publicada en su web personal.

Este gestor cultural, licenciado en Bellas Artes por la Universidad Complutense de Madrid, también ha desarrollado una labor de enseñanza en cursos de postgrado especializados y ha asesorado sobre espacios expositivos y museos como la Fundación Telefónica. Ha trabajado para la Alhambra de Granada, la Biblioteca Nacional de España, la Fondation Bergé-Saint Laurent, de Francia, o el Círculo de Bellas Artes de Madrid. "Es un profesional que colabora habitualmente con museos como el Prado o el Thyssen y es un hombre que no guarda ningún tipo de vinculación con Zamora", según han conformado fuentes de la Semana Santa. Además, el escenógrafo de exposiciones ha venido en varias ocasiones a visitar las actuales dependencias del Museo de Semana Santa.

En otro orden de cosas, el nuevo Museo de Semana Santa "tiene que ir más allá de los asuntos relativos a la Semana Santa" defendió ayer la presidenta de la Junta de Cofradías, Isabel García Prieto. La semanasantera desgranó que "deberá incluirse exposiciones periódicas que sean un referente más allá de nivel local, pues estarán representadas Semanas Santas de otras localidades y también porque queremos que sea un referente mundial e internacional". Respecto al proyecto constructivo, la máxima responsable de la Junta pro Semana Santa reiteró que, siguiendo los cauces legales, se convocará "un concurso arquitectónico a nivel internacional en el que iremos de la mano con el Colegio de Arquitectos de Zamora".