La última novela de Teresa Viejo, "Animales domésticos", es mucho más que un thriller psicológico que arranca cuando la protagonista descubre que la persona con la que ha compartido los últimos años de su vida, su marido, no es quien pensaba. Las "últimas capas de la cebolla" de esta obra escarban en las relaciones de pareja del siglo XXI, caracterizadas por "la sensación de inquietud y vacío a la hora de relacionarnos los hombres y las mujeres", según resume la autora.

La periodista, quien protagonizó el Club LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA de esta semana, reconoce que las nuevas aplicaciones para encontrar pareja que existen han acelerado el proceso, "pero el cambio en las relaciones ya iba por esa línea, de relaciones frágiles, más bien conexiones, con personas que se encuentran en una intersección breve y se separan sin que haya ningún motivo". De hecho, esta última acción se denomina "ghosting" (en inglés fantasma), con lo que cada vez es más habitual que tras varias citas "y cuando parece que todo va bien, un día escribes un mensaje y no recibes ninguna respuesta ni sabes más de esa persona", explica.

"Antes lo normal era encadenar monogamias, pero ahora parece que los hombres y mujeres tienen una carrera para sumar muescas, pero cuando les preguntas sin son felices, ven que no, porque no encuentran una pareja estable. Y la razón es que no se comunican", apunta Viejo, quien asegura que este nuevo siglo apunta hacia "relaciones muy cortas, ausencia de compromiso y solteros por doquier viviendo en sus bonitos apartamentos", describe.

Por último, la periodista asegura que este es un tema recurrente cuando se entrevista con políticos y responsables públicos. "Les pregunto qué piensan hacer con esta sociedad que se llena de viejos solos, hombres y mujeres con un desafecto por el amor, que no sabemos relacionarnos y solo enviamos whatsapp, lo que también lleva a convertirse en una sociedad deprimida, porque cuando llegan a casa, se encuentran solos", resume preocupada.