El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias -ADIF- ha sacado a licitación la construcción de la estación de alta velocidad en Otero de Sanabria, inscrita en el tramo Cernadilla-Pedralba de la Pradería del corredor norte-noroeste de la alta velocidad ferroviaria. La infraestructura, que durante los años más duros de la crisis económica llegó a estar en entredicho, verá la luz en los próximos meses después de que el Ministerio de Fomento y ADIF hayan dado un paso más para avanzar hacia su construcción.

La estación se construirá, como estaba previsto, en la localidad de Otero de Sanabria, que forma parte del término municipal de Palacios de Sanabria. El acceso hasta la estación del AVE se realizará a través de un nuevo vial de conexión cuya construcción forma también parte de los más de 5 millones que ADIF destina a esta infraestructura. Esta ramificación partirá de la carretera nacional N-525, que a su vez enlaza la zona con la autovía de las Rías Baixas (la A-52).

El contrato sale a licitación por un importe de 5.121.748 euros, IVA incluido. El plazo de ejecución, una vez adjudicada la obra a la empresa que ofrezca mejores condiciones a la administración pública, es de nueve meses.

La licitación del contrato de la estación de Otero de Sanabria es la segunda novedad importante que dejan las obras de la alta velocidad ferroviaria a su paso por la provincia de Zamora en las últimas jornadas. En su edición de ayer, este diario informaba del cambio de planes del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias y del Ministerio de Fomento en lo que tiene que ver con el propio trayecto del tren. Aunque en principio la idea que se barajó, y con la que comenzaron los trabajos, era la de construir una línea ferroviaria de alta velocidad de vía única en la mayor parte de su trazado entre Zamora y Galicia, Fomento ha decidido finalmente dotar a la mayor parte del trazado de doble vía.

Esta última novedad viene a significar que, si se tienen en cuenta los más de 210 kilómetros de línea ferroviaria que tendrán que unir Zamora y Taboadela -municipio que está a las puertas de Orense capital-, unos 175 kilómetros serán de doble vía, algo más del ochenta por ciento del recorrido total. Los planes iniciales, que estaban muy marcados por un grave contexto de crisis económica, contemplaban solo 80 kilómetros de doble vía. Sobre el papel, esta modificación hará posible un menor tiempo de viaje entre Galicia y Madrid, algo de lo que lógicamente se beneficiará Zamora. También, al poder cruzarse los trenes, se abre la puerta a un aumento de las frecuencias de los trenes.