"La falta de compromiso de la Junta con Zamora profundiza aún más en el abismo y hundimiento de la provincia". Con estas palabras han criticado los procuradores regionales socialistas Ana Sánchez y José Ignacio Martín Benito los presupuestos de la Junta para este año, que rebajan la inversión un 15% hasta dejarla en 24,4 millones de euros: 22,3 en inversión propiamente dicha y dos millones en transferencias de capital.

Mientas Ana Sánchez calificaba las cuentas como "juego de trileros", Martín Benito denunciaba las "raquíticas partidas" de importantes proyectos para la provincia, como la carretera de Porto, que cuenta con 50.000 euros para un proyecto que en su día se presupuestó en doce millones de euros, pero que se ha quedado en dos millones para el arreglo del firme y no finalizará hasta 2020.

O los centros de salud Parada del Molino y Villalpando, que vienen desde 2009 y 2007 respectivamente, aunque se paralizaron durante los recortes provocados por la crisis. Aun así, en los presupuestos de 2016 figuraba que este año, 2017, se iban a invertir un millón en Villalpando y 2,4 en el Parada del Molino, mientras las partidas reales han sido de 15.000 y 20.000 euros, respectivamente.

No aparece partida para el Conservatorio de Zamora, a pesar del acuerdo en las Cortes, ni para el Museo de Semana Santa, que no figura como tal en ningún lado. Las ayudas para las zonas de influencia socioeconómica de los espacios naturales se han retomado este año, pero con una cuantía de 1,2 millones, frente a los 10 que contaban con anterioridad, un descenso del 88% que "a repartir entre todos los pueblos afectados, no da ni para pipas".

Por último Ana Sánchez explicó que su grupo mantiene la propuesta de Plan de Dinamización para la provincia de Zamora, que trata de aprovechar ayudas del Plan de Reindustrialización regional y que es perfectamente compatible con el Plan Zamora 10 que han presentado los empresarios de Zamora.