Cientos de zamoranos dieron ayer el último adiós en la iglesia de San Torcuato a quien fue baluarte del sindicalismo agrario de Zamora en las dos últimas décadas del siglo pasado, José Emilio Aguirre, fallecido el martes a los 70 años, auténtico alma de la organización Asaja que durante su etapa como presidente funcionó como una gran familia, centrada en la lucha por situar al sector primario como punta de lanza de la economía zamorana. Una lucha que llevó al sindicato a situarse en primera línea de la acción política en la provincia y tanto en el parlamento de Castilla y León como en el nacional, con su predecesor Modesto Alonso como procurador autonómico y el propio Aguirre como senador. No faltaron los recuerdos sobre aquellos años de gloria para Asaja, en los que un sindicato tuvo el poder de determinar la estabilidad de la gobernabilidad de la Diputación de Zamora bajo el mandato de Antolín Martín, candidato del PP.

A la despedida no faltó el presidente de la Cámara de Comercio e Industria, Manuel Vidal, primo carnal del fallecido, visiblemente afectado; el expresidente de la Junta pro Semana Santa, Antonio Martín Alén; y quienes formaron equipo con Aguirre en aquellos tiempos de esplendor, quienes fueron parte esencial del equipo directivo como Gonzalo García, Efrén Domínguez, Javier Aguado y Germán Juárez, núcleo duro de la Diputación Provincial.

Entre los cargos políticos que acudieron a la misa de funeral estaban el exalcalde de Zamora por el PP, Antonio Vázquez; el exteniente alcalde del PP en Zamora, Ángel Macías; el exedil PP de la capital Ricardo Ferrero; y el procurador del PP en la actualidad y expresidente de la comisión de Agricultura de las Cortes, Óscar Reguera.