Naturaleza, valor paisajístico y promoción. Son los tres pilares en los que se asienta la Reserva de la Biosfera Meseta Ibérica para dar pasos en su difusión tanto nacional como internacional. En el ámbito de la divulgación dentro del país, el territorio se ha hecho un hueco en la publicación oficial de los ministerios de Agricultura y Fomento dedicada a las reservas de la biosfera españolas y que incluye todos los territorios adheridos a la red, incluida Zamora.

La publicación oficial califica a la Reserva de la Biosfera transfronteriza como un paradigma natural "de amplísima superficie a lo largo de la frontera norte de España y Portugal con variedad de paisajes, elevada riqueza de elementos orográficos y una heterogeneidad marcada en la ocupación del suelo, que en conjunto constituye una matriz riquísima de elementos paisajísticos", expone el texto. Su riqueza viene dada por "su enorme tamaño" con 87 municipios incluidos.

Fue un 9 de junio de 2015 cuando la declaración se hizo oficial y, desde esa fecha, la provincia de Zamora pasó a estar incluida en el mapa de territorios con una reserva de la biosfera, un marchamo de calidad medioambiental y sostenibilidad turística que concede la Unesco a los territorios que cumplen unos determinados requisitos zamoranos. En el caso de Zamora, la nueva reserva transfronteriza incluye la zona de los Arribes del Duero, el parque natural del Lago de Sanabria y la reserva de la Sierra de la Culebra. A ese territorio se suman además la zona salmantina del parque natural Arribes del Duero y territorios portugueses de la frontera. De hecho, el aislamiento que ha sufrido históricamente la zona del Duero fronterizo a uno y otro lado de La Raya le ha permitido conservar unos valores medioambientales que han sido la base del reconocimiento de la Unesco.