A lo largo de esta semana se celebra el vigésimo segundo Curso Internacional de Interpretación para Instrumentos de Viento y Cuerda en el Centro Integrado de Formación Profesional. En el campamento veraniego se han juntado más de 100 músicos de edades comprendidas entre los nueve y los veintidós años. Y no solo de nacionalidad española, sino que también han acudido alumnos de Bulgaria, Francia, Rumanía e incluso hubo peticiones desde Venezuela. El director de la semana musical, Miguel Martín, explica las vicisitudes de la semana musical.

-Si tuviera que resumir el curso ¿cómo lo haría?

-Ante todo debemos destacar que es uno de los de mayor antigüedad de la ciudad de Zamora. Y además, me atrevería a decir que es el que cuenta con más especialidades de Castilla y León. Con esto me refiero a que además de las disciplinas instrumentales (viento-metal, viento-madera y cuerda) formamos agrupaciones que en otros talleres sería más complicado llevarlas a cabo. En este caso, nuestras asociaciones son: la banda, las agrupaciones de cámaras y la Big Band. Esta pluralidad hace que nuestros músicos vean enriquecida su formación.

-Han pasado veintidós años desde que comenzó esta iniciativa en la ciudad. ¿Cómo se gestó este proyecto?

-Sí, ya son veintidós años en esta aventura que inicié junto al profesor de trompeta Juan Vicente Aguado Martín (Catedrático del Conservatorio Superior de Madrid). Decidimos hacerlo para que los alumnos de Zamora pudieran acceder a una actividad de esta envergadura, que por aquellos años no se realizaba en toda Castilla y León.

-Una de las características del evento es que los alumnos compiten entre ellos.

-Así es. De alguna manera hacemos un concurso de grupos de cámara en el cual cada conjunto compite dentro de su modalidad instrumental. La finalidad de esta competición es motivar a los alumnos a que continúen trabajando una vez terminadas las ocho horas diarias de clase.

-Ocho horas al día. ¿Son necesarias tantas?

-Sí, sin duda. En otros campamentos a veces se da clase cada dos días y esto desemboca en que lo impartido no cale en los alumnos. En este curso los alumnos reciben cada día su clase individual, también la formación de cámara y luego practican junto a un profesor en la Big Band. E incluso una vez acabadas las clases ellos continúan practicando, tienen una energía brutal.

-Música de cámara y música de orquesta. Sin duda no son los estilos que actualmente más relevancia tienen. ¿Podrán acabar las nuevas tendencias con la música clásica?

-Yo creo que no. Y además, para eso ya estamos los músicos, que debemos pelear para que este tipo de música siempre perviva. Aunque realmente son las propias obras las que consiguen perpetuarse en el tiempo, a diferencia de la música moderna y actual que se olvida en cinco años porque es una música circunstancial, realizada para un público determinado en un momento determinado. Sin embargo, la obra que vamos a interpretar en uno de nuestros conciertos, "Los Cuentos de Hoffman" -banda sonora de "La Vida es Bella"- pasa el tiempo pero no pierde su esencia ni deja de maravillar por muchas veces que se interprete. Y lo mismo con cualquier otro compositor clásico.

-Este año la Big Band se presenta como la novedad. ¿En qué consiste esta agrupación?

-La Big Band es una formación en la que participan esencialmente instrumentos de viento. Y la principal característica es que la música es más moderna. Este año el estilo se centrará en la música disco.

-¿Cuántos conciertos van a representar durante esta semana?

-Un total de tres. El primero será el IX Concurso de Cámara, que tendrá lugar en el teatro Elvira Fernández el viernes cinco de agosto a las siete y cuarto de la tarde; el segundo será el sábado seis de agosto en la plaza de la Catedral, a las ocho de la tarde y el último se desarrollará el domingo siete en el paraninfo del Colegio Universitario, a las doce y cuarto de la mañana.

-¿Qué es lo que más les gusta a los estudiantes?

-Según mi experiencia, de lo que más disfrutan es de la constante actividad, no paran. Y además es algo que agradecen, porque si les das solo una clase y les dejas demasiado tiempo libre los alumnos consideran que han venido para no hacer nada y acaban aburriéndose.

-Dentro de la música clásica ¿cuáles son los estilos que más practican aquí?

-Vamos desde el renacimiento, pasando por el barroco, clasicismo, romanticismo hasta prácticamente copar todas las etapas de la música hasta llegar a las bandas sonoras del siglo XX y XXI.

-Dentro del profesorado ¿cuál es el método a seguir para hacer llegar los conocimientos que se desean transmitir?

-Primero: que el alumno disfrute aprendiendo. Esto es fundamental. Luego, yo aplico la técnica matemática de la propiedad conmutativa: el orden de los factores no altera el producto, los músicos deben aprender disfrutando o un disfrutar aprendiendo, pero ambos elementos no se entienden el uno sin el otro. Para conseguir este resultado, personalmente intento subdividir los conocimientos de forma que consigan entender las nociones que les queremos trasmitir.