La gestión "indirecta" del teatro Ramos Carrión de la capital, que aspira a convertirse en el "referente de las artes escénicas de la provincia", costará 831.000 euros al año, con la previsión de que su programación estable arranque en el último trimestre de este 2016. Así lo anunció ayer el vicepresidente tercero de la Diputación, Aurelio Tomás, que explicó también que la futura empresa al frente de la infraestructura deberá gestionar "un mínimo de 85 días de actividad al año" ampliables dentro de las mejoras a otros diez más, con el ánimo de que el Ramos tenga actividad durante 100 días. El 10% del programa estará reservado para ciclos de grupos folclóricos, musicales, teatrales o de cualquier otra disciplina de la provincia. A su vez, la Diputación Provincial dispondrá de un mínimo de 30 días más para programar sus actuaciones, tales como premios de la institución o el Día de la Provincia.

El pliego de condiciones para formalizar el contrato de la gestión indirecta integral de todos los espacios estipula una vigencia de dos años prorrogables por otros dos más e incluye la gestión del propio teatro, del área de exposiciones y de las tres salas polivalentes, con capacidad para 300 butacas para la celebración de reuniones, congresos o proyecciones.

La fórmula de la gestión indirecta se ha impuesto como "la más favorable" tras recoger las conclusiones del estudio contratado el pasado año por la Diputación para analizar las opciones. La gestión mixta y la directa por parte de la propia institución provincial -esta última, la más descartable- fueron dos de las fórmulas analizadas en el estudio, que concluyó que "la más eficaz" era la indirecta, insistió ayer el diputado Aurelio Tomás durante el anuncio de la aprobación del expediente de contratación.

Sobre la existencia de otros teatros en la provincia y en la propia capital, como el Principal, Tomás matizó que "no se trata de competir sino de complementar", aludió, en referencia a infraestructuras "diferentes" en cuanto a las proporciones, ya que el Ramos duplica en butacas al Principal. En este sentido, ballet, zarzuela, ópera, espectáculos infantiles o grandes musicales tendrán cabida en el Ramos Carrión una vez arranque su actividad, con una programación trimestral.

La puesta en marcha del teatro y centro de congresos implicará la contratación de ocho trabajadores entre director, tres técnicos y cuatro auxiliares, entre ellos, dos taquilleros, un acomodador y un portero.