La situación que vive el local de la asociación cultural Capitonis Durii ha llegado al límite. Las intensas lluvias y rachas de viento registradas en la capital durante los últimos días han provocado que las goteras se reproduzcan y las grietas en el techo se hagan más amplias. Una tesitura que ha generado preocupación en el seno de la agrupación ante las visitas que diez centros educativos tienen programadas para el próximo mes de mayo y que están barajando suspender ante la imposibilidad de comprometerse a asegurar la integridad física de los menores por el riesgo de desprendimientos en techos y paredes.

El presidente de Capitonis Durii, Luis Fernando García, ha lanzado una llamada SOS al Ayuntamiento de Zamora para que acometa una reforma integral en el local situado en la antigua estación de autobuses. "Nos hemos reunido con el concejal de Obras, Romualdo Fernández, que ha tenido muy buenas palabras. Entendemos que quizá esta sede no es un asunto prioritario para el Ayuntamiento, pero la situación es ahora de máxima urgencia", apunta.

Las diferentes estancias del museo permanente de Capitonis Durii son una sucesión de barreños recogiendo agua de las goteras, cartones que intentan filtrar las precipitaciones, grietas en el techo que el sol atraviesa y desconchones en las paredes fruto de la imperante humedad que se respira en todo el local. "La cuestión más peligrosa y más urgente es el techo, porque se filtra agua desde varios puntos. Y el problema ya no es solo a nivel de estructura, sino que también nos preocupa el capital humano de quienes pasamos allí muchas horas rodeados de humedad y con riesgo de desprendimientos", analiza García.

La reivindicación de Capitonis Durii, que entiende que existan otros asuntos urgentes para el Ayuntamiento, es que el compromiso de Romualdo Fernández se materialice cuanto antes. "Lo que nosotros pedimos es que ese papel en el que pone que se va a arreglar el local se coloque encima del montón que hay en la mesa", concluye el presidente de la agrupación.