Rostros de sorpresa cuando comenzaron a salir los músicos que integran la Banda de Música de Zamora, ataviados con pajarita dorada para festejar los diez años de los conciertos divertidos, propició el espectáculo "Recordando una década". Esta nueva edición de la iniciativa, que aproxima la música a los niños, arrancó ayer en el Teatro Principal con un lleno total de pequeños acompañados por adultos, principalmente padres y abuelos. Cristina Castro se animó a acudir por primera vez con sus hijos, de 4 y 5 años, porque "es complicado encontrar actividades adecuadas a sus edades", certifica. También presenciaron el concierto divertido desde las butacas varios de los antiguos directores de la banda de música y antiguos presidentes de la asociación cultural de la banda, a los que se recordaba en la propuesta que celebra su décimo aniversario.

Dos jóvenes integrantes de la banda, Érika Salas y Lucía Crespo, hicieron las funciones de maestras de ceremonias con unos amenos y divertidos versos, mientras que otros compañeros ejercieron de actores. En un singular sorteo, dos músicos, a modo de niños de San Ildefonso, seleccionaron de entre los espectáculos de anteriores, cuatro y a partir de los títulos contaron cuentos jalonados con la interpretación de, entre otras piezas, "Aniversary Marcha -cha", "Bailando", de Enrique Iglesias o "Les avions". Además, se estrenó la pieza "Que se haga la música", de Miguel Mateos, que a través de una letra explica las distintas familias de instrumentos presentes en una banda.

Los pequeños asistentes también tuvieron su protagonismo en el concierto. Así, siete niños, vestidos con las camisetas de la banda que acababan de regalarles, reemplazaron durante unos minutos al director Manuel Alejandro López. Las siguientes oportunidades para descubrir "Recordando una década" serán el 14 de febrero, 12 de marzo y 30 de abril, todos a las 12.00 horas.