Rebeca Olivar Vaquero acaba de ser elegida presidenta de la Asociación Zamorana de la Música "Bellas Artes", un colectivo cultural fundado en el año 1949 que ahora comienza una nueva etapa y con la que puede contactar a través de su página web, en el apartado de correos 328 de Zamora o en los lugares donde efectúan conciertos una vez al mes.

-¿Desde cuándo forma parte del colectivo?

-Aproximadamente desde hace un año. Entro por mis inquietudes, dado que la música me gusta mucho, y porque me doy cuenta de que me apetece formar parte de un colectivo que conozco bien por mi familia.

-¿Qué le ha movido a presentarse a las elecciones de la presidencia?

-Surge la vacante de la presidencia y me presento porque quería que entrara savia nueva a esta asociación que tiene más de 60 años de historia. Mis conocimientos completarían la experiencia de los socios que han trabajado durante muchos años para que la asociación siga adelante.

-¿De quién se ha rodeado en la directiva?

-Me acompaña un vicepresidente que también ha estudiado música y es organista, Carlos Alberto Riego. También la vocal, Isabel Pérez, así como la gente veterana de la asociación como el secretario, José Martínez que lleva unos 15 años; el tesorero, Tomás Pérez; como relaciones públicas, Juan Manuel Sánchez; como portavoz, Emilio Alonso y como asesor, Benito Olivar.

-Comienza una nueva etapa cuyos objetivos son...

-Queremos que la asociación se dé a conocer en la sociedad zamorana. Para nosotros son muy importantes las tecnologías de la información para que la agrupación se promueva en la provincia. Ya tenemos página web, aunque registra pocas visitas, y contamos con perfil en Facebook. Además una de nuestras prioridades es que entre a la asociación gente, fundamentalmente joven, a quien le guste la música y que quiera compartir su afición con nosotros y que desee asistir a nuestras actividades, que no solo son conciertos. Así hacemos también viajes culturales tanto por España como excursiones culturales a Alemania o Suiza, entre otros países. Yo quiero que la asociación sea un punto de encuentro entre las personas a las que les gusta la música.

-En Zamora existe una afición, pero ¿cuesta dar el paso de hacerse socio de la agrupación?

-Sí, creo que se trata de un problema de desconocimiento de la asociación. Ahora mismo formamos parte del colectivo unas 200 personas a partir de los treintatantos. Somos un reflejo de la sociedad zamorana, de ahí que queramos hacer una renovación.

-¿Cómo van a intentar darse a conocer entre los más jóvenes?

-En nuestros estatutos figura que los alumnos del Conservatorio de la ciudad pueden asistir a nuestros conciertos de manera gratuita simplemente con que presenten el carné de estudiante del centro. Sería una manera de que completen sus clases teóricas con prácticas que les permitiría escuchar a excelentes profesionales.

-A este respecto ¿han mantenido contacto con responsables del Conservatorio Profesional de Zamora?

-Ya hemos tenido contacto a través de su página web y hemos hablado con docentes del centro para que cuelguen en su web nuestros conciertos y actividades. Además creemos que sería interesante contactar con colectivos musicales de la ciudad, como la Banda de Música de Zamora, la Banda de Música Maestro Nacor Blanco o la Joven Orquesta Sinfónica de Zamora, para que acudieran a nuestros conciertos o que se hicieran socios.

-La asociación realiza mensualmente un concierto.

-Desde hace muchos años tenemos contactos con agencias musicales que cuando concluye nuestra temporada, que es de octubre a junio, nos facilitan un dossier de los grupos y posteriormente la junta directiva elige a los artistas. Traemos música clásica, de cámara, orquestas o jazz, que volveremos a traer. Además, queremos traer zarzuela nuevamente en San Pedro. A mayores tenemos que contactar con los titulares de los espacios para los conciertos de Zamora. Cuando el concierto requiere de un piano, dado que solo hay uno en Zamora, tenemos que hacerlo en el salón de actos de la Biblioteca Pública, que alberga el piano que la asociación tiene en usufructo.

-¿Existe una carencia en Zamora de espacios para conciertos?

-Sí, porque el salón de Caja España era un excelente espacio, pero como ahora no hay obra social solo podemos para hacer los conciertos en el paraninfo del Colegio Universitario, el salón de actos de la Alhóndiga y el de la Biblioteca Pública.

-El futuro del Ramos Carrión está todavía en el aire. ¿Debería de abrirse a los colectivos locales?

-Sin ninguna duda porque es un teatro con un gran aforo que pertenece a la provincia. Sería ideal poder realizar conciertos en el Teatro Ramos Carrión, pero se necesitaría un piano. Zamora necesita un auditorio con una buena infraestructura y una programación estable de calidad en la que se deben contar con las asociaciones locales que apoyan las artes, desde el teatro hasta la música.

-¿Qué les mueve a volver a traer zarzuela?

-Queremos traer coincidiendo con San Pedro a un grupo interesante de zarzuela donde canta un zamorano. Queremos trabajar para lograr que una institución patrocine el evento para poder hacerlo en un lugar grande y abrirlo a la sociedad zamorana, pero necesitamos un piano. Hace años realizábamos dos conciertos de acceso gratuito en el patio del Parador y también en el de la Diputación para atraer socios, una idea que queremos retomar ahora. Nuestra actividad de potenciar la zarzuela no está reñida con la que realiza la Asociación Amigos de la Ópera. Además, a lo largo de los 66 años de la asociación se han realizado exposiciones y hasta conciertos de flamenco.

-En la ciudad en los últimos años han emergido grupos de cámara y otro tipo agrupaciones. ¿Les darán la oportunidad de tocar?

-La nueva directiva lo va a estudiar, pero en la agrupación tenemos interés en dar cabida a las nuevas figuras. Durante varios años la asociación promovió conciertos de jóvenes intérpretes zamoranos a fin de darles a conocer y ayudarles a hacer un currículum. Trajimos a Natalia Zapatero, María Sobrina, Elisa Jambrina, entre otros, pero en el 2007 con la crisis se redujeron el número de socios y las posibilidades de subvenciones de las instituciones.

-¿Nos cuesta pagar por asistir a conciertos?

-En Zamora hay mucha afición. Al concierto gratuito va todo el mundo, mientras que el de pago es más restringido. Nos tenemos que mentalizar de que una propuesta cuando es buena hay que pagarla. Nos hemos acostumbrados a una cultura subvencionada y cuando hay que pagar ocho euros al mes por asistir a nuestros conciertos, parece que cuesta. Nuestra cuota si la comparamos con el precio de un evento deportivo o de un concierto de música moderna es muy asequible. Si ir más lejos la Orquesta de Moldavia cuesta hasta 20 euros en el Principal y merece la pena pagarlos. Además, tenemos que tener presente que nosotros contratamos a formaciones de Alemania, Chequia o Suiza por lo que exigimos la presentación del programa-invitación.

-El día 20 festejan a santa Celicia. ¿De qué manera?

-Tenemos una misa en la iglesia de San Andrés, oficiada por nuestro capellán Juan González. Posteriormente hemos programado un concierto de la agrupación Ars Colleguien, integrada por once músicos en el Colegio Universitario a las 20.30 horas y luego una cena en un restaurante de la ciudad.