Los bancos son los principales morosos de las comunidades de vecinos de la provincia. Así lo asegura el Observatorio de las Comunidades de Propietarios, entidad a la que pertenece el Consejo General de Colegios de Administradores de Fincas de España, que en su último informe eleva la deuda de las entidades financieras con las comunidades de vecinos a 1,37 millones de euros. Las deudas, avisan los impulsores del informe, son causa de muchos quebraderos de cabeza para los vecinos afectados, que son incapaces de aprobar derramas y de costear, en casos extremos, el funcionamiento normal del inmueble.
El informe prevé que esta deuda sufra un "ligero incremento" a lo largo de 2015, al tiempo que la ya existente "seguirá generando problemas económicos en los próximos años a las comunidades de propietarios". En cifras generales las comunidades de vecinos zamoranas tienen contabilizadas deudas por 7,87 millones de euros. El cruce de ambas cifras arroja un dato preocupante. El 17,41% de las deudas de las comunidades de vecinos se derivan de los impagos de las comunidades financieras, casi un euro de cada cinco.
Pese a todo, los propietarios de viviendas de Zamora son unos afortunados si se comparan los datos con los registrados en otras provincias cercanas. En León las deudas de las entidades financieras con las comunidades de vecinos superan el 21% del total. En Salamanca, Valladolid y Palencia rozan el 25% y en Segovia superan el 33%. Sin embargo, todos estos datos se quedan cortos si se comparan con los registrados en Soria, donde las deudas de los bancos con las comunidades de propietarios supera el 51% del total, el dato más alto del país.
No hay datos provincializados al respecto, pero según las estadísticas del Observatorio de las Comunidades de Propietarios prácticamente uno de cada cuatro bloques de viviendas de Castilla y León confiesa que la situación es tal que es imposible solucionar los imprevistos que surjan en el inmueble en un plazo de tiempo razonable. Pese a todo, el dato es de los mejores del país. El 64,1% de las comunidades de vecinos de Canarias se encuentra en la misma situación, algo que comparten más de la mitad de los propietarios de pisos en las comunidades de Murcia o Andalucía.
