"Es un desastre". El montañero Martín Ramos no sale de su asombro ante la magnitud de la tragedia del terremoto que ha desolado Katmandú, capital de Nepal, y que se ha llevado hasta el momento la vida de más de 2.200 personas. Gran conocedor de la zona, el montañero no puede evitar pensar que hace un año, más o menos por estas fechas se encontraba allí. "Ahora mismo hay mucho turismo en la zona", explica Ramos ya que la ciudad nepalí se encuentra en la época conocida como el pre-monzón.

El zamorano relata, todavía atónito ante la tragedia, que ahora mismo se encuentra allí su gran amigo Jorge Egocheaga que había ido con la asociación SOS Himalaya en labores humanitarias. "Se que está bien", expresa Ramos que ha podido hablar con el entorno del montañero asturiano y que a pesar de "las dificultades" tiene la tranquilidad de que encuentra en buen estado. "Además al haberse encontrado con esto, estoy seguro que Jorge no está parando de atender a las víctimas e incluso seguro que está haciendo funciones de médicos".

Un golpe muy fuerte

Las catástrofes naturales son inexplicables y "no se pueden prever" pero "si un desastre de estos en cualquier país es un golpe muy fuerte y un colapso, imagina en un país tan pobre como Nepal", se sincera el montañero. Además, si esto ocurre en un país desarrollado enseguida "se ponen medios y todo es más rápido pero ellos son muy pobres".

Martín Ramos está constantemente pendiente de lo que ocurre en la zona y es que en la mañana de ayer una nueva réplica de 6,7 en la escala Ritcher ha vuelto a sembrar el pánico y ha provocado nuevos aludes en la zona del Everest. Asimismo, este zamorano también está pendiente de todos los amigos que dejó allí y es que trabajan con una agencia de la zona y "para estos pequeños empresarios esto corta todo" ya que conseguir salir adelante en estos países es mucho más complicado. "Esta claro que es un palo para todo el país pero para esta gente mucho más", se lamenta el alpinista zamorano. Martín Ramos tiene previsto visitar el país en la primavera del año que viene.

El epicentro del terremoto se localizó a unos 150 kilómetros del noroeste de Katmandú pero la gran intensidad, 7,9 en la escala Ritcher, se dejó notar también en zonas de India, China y Bangladesh. Además de la tragedia en la ciudad, que ha quedado totalmente devastada, el seísmo se ha traducido en grandes aludes en la zona del Everest, lo que ha provocado que al menos haya 17 montañeros fallecidos y decenas han resultado heridos. Esta época es la que eligen los alpinistas profesionales para comenzar la temporada de escalada.

En su último viaje a Nepal, Martín Ramos consiguió coronar el Kanchenjunga, la tercera montaña más alta del mundo, después del monte Everest y del K2, con una altura de 8.586 metros. Fue un reto que al zamorano ya se le resistió en 2012 y es que una avalancha les obligó a regresar sin cumplir con su objetivo cuando se encontraban comenzando la ascensión. La ascensión a esta montaña la hizo con Jorge Egocheaga, el montañero que se encuentra ahora en Katmandú y que con el ascenso al Kanchenjunga consiguió coronar los catorce ochomiles. Kangchenjunga, que significa: "Los cinco tesoros de las nieves" tiene cinco picos, cuatro de ellos por encima de los 8.450 metros, y es uno de los retos más complicados a los que se ha enfrentado el experimentado montañero. Ahora solo queda esperar que no haya muchas más víctimas y que "esto no vuelva a ocurrir", subraya Ramos.