Los zamoranos elevaron una veintena de quejas a la Agencia Española de Protección de Datos en el ejercicio 2013, último del que se disponen datos. Así lo atestigua la memoria del organismo, que refleja un importante aumento de las quejas en el último lustro. Así, en el año 2008, cinco años antes del dato más actual, los zamoranos no interpusieron ninguna reclamación ante Protección de Datos.

En términos regionales las denuncias interpuestas por ciudadanos de Castilla y León ante la Agencia Española de Protección de Datos se han multiplicado por ocho en cinco años al pasar de las 46 registradas en 2008 a 395 en 2013. Irregularidades detectadas contra la actuación de una administración, una empresa u organismo privado por conductas como el uso o la cesión de datos a terceros sin consentimiento del afectado, la suplantación de la identidad, la inclusión en un fichero de morosos, la publicación de fotos de menores sin el consentimiento de los padres o la grabación de imágenes con cámaras que atentan contra la intimidad de las personas, entre otras actuaciones, se corresponden con las principales quejas de los ciudadanos.

Una de las mayores preocupaciones de los ciudadanos son las cámaras de videovigilancia. Por sectores de actividad, casi uno de cuatro sistemas de cámaras está situado en el comercio, seguido de los establecimientos de turismo y hostelería (12%) y comunidades de propietarios (8%). La Agencia de Protección de Datos no facilita datos provincializados en este apartado.

Fuentes de la Agencia Española de Protección de Datos explican que las cámaras y videocámaras instaladas en espacios privados no podrán obtener imágenes de lugares públicos. "Podrían tomarse grabaciones parciales y limitadas de vías públicas cuando resulte imprescindible para la finalidad de vigilancia que se pretende, o resulte imposible evitarlo por razón de su ubicación", apuntan.