El Ayuntamiento valora la adecuación de una sede provisional para el Museo de Baltasar Lobo durante el periodo transitorio entre el fin del contrato de alquiler de la Casa de los Gigantes el próximo mes y la reubicación prevista en el viejo Consistorio. Para ello, será necesario que los agentes de la Policía Municipal se trasladen al Banco de España, cuyas obras aún no han comenzado después de la adjudicación reciente del proyecto. Este retraso en los trámites hace imposible que el viejo Consistorio esté a punto para cuando expire el contrato de alquiler de la Casa de los Gigantes, ni siquiera haciendo uso de la prórroga de tres meses, que finalizaría en marzo.

El convenio en vigor no contempla una nueva ampliación de plazos para hacer uso del edificio, lo que abre al Ayuntamiento dos posibilidades: negociar un nuevo contrato -el alto precio del alquiler hace que esta opción sea la más volátil, salvo improbable acuerdo de reducción del arrendamiento- o habilitar una ubicación temporal. El propio concejal de Turismo, Francisco Javier González, reconoce que la cuantía económica "es muy alta y si es para poco tiempo quizá no sea necesario", sopesa. No obstante, el también portavoz del equipo de Gobierno aclara que el cierre al público de la actual obra de Lobo "está descartada", asegura. Del mismo modo, incide en que, en el caso de habilitar una sede provisional, sus costes serán "absolutamente mínimos".

El último acuerdo alcanzado entre el Ayuntamiento y el propietario de la Casa de los Gigantes eximía a la institución municipal de revertir el edificio al estado en el que se encontraba en el momento de la contratación, es decir, como bar-cafetería, una de las cláusulas del antiguo pliego que supondría el desembolso por parte de la institución local de 113.000 euros, según un proyecto elaborado por técnicos municipales para tasar el alcance de la operación. Aunque no tendrán que instalar ese material, lo cierto es que los propietarios han solicitado ya la devolución de los útiles que el Ayuntamiento retiró a la hora de adecuar el museo, custodiados hasta el momento en un almacén.

El precio de alquiler pactado por el arrendamiento de la Casa de los Gigantes para este año es de 103.000 euros al año, es decir, 8.583 euros al mes. La cuantía es casi similar a la abonada durante los últimos cinco años -financiada por fondos europeos-, ya que hasta diciembre del pasado año el coste del arrendamiento era de 96.000 euros -8.000 al mes- frente a los 103.000 euros que paga en lo que va de curso. El acuerdo estipula también que todos los elementos fijos expositivos, la mayoría, fabricados a medida, podrán permanecer en la Casa de los Gigantes.