El presunto maltratador, que agarró a su expareja y la tiró contra la pared durante una discusión en el domicilio familiar, según la denuncia de la Fiscalía, se enfrenta a una pena de 10 meses de prisión, dos años de alejamiento de la mujer y dos de retirada de armas, penas que solicitó el Ministerio Público que ejerció la única acusación personada en la causa. La presunta víctima, que precisó de asistencia médica tras el altercado, se negó ayer a declarar durante el juicio desarrollado en el Juzgado de lo Penal, en el que el abogado del imputado exigió su libre absolución. El procesado por violencia de género admitió en su declaración ante la magistrada que había protagonizado una discusión con la que entonces era su compañera sentimental, pero negó la agresión, si bien se activó el protocolo por maltrato, de acuerdo con lo acreditado por Fiscalía.

Por otro lado, dos hombres fueron ayer condenados por las lesiones que se causaron en una pelea. Uno tendrá que abonar una multa 540 euros e indemnizar con 1.200 al otro, así como abonar 350 al Sacyl por la atención al herido. El otro, pagará una multa de 120 euros; 420 a su víctima y 171 al Sacyl.