La cuenta de Twitter de Soraya Arnelas está que echa humo entre sus seguidores zamoranos desde que la cantante subiera fotos en el salón de Plenos del Ayuntamiento, realizadas antes de comenzar el concierto que dio en la Plaza Mayor, en plenas fiestas de San Pedro. Unas imágenes que no habrían suscitado tanta polémica si estas no hubieran venido acompañadas por las quejas que, según se ha asegurado desde Izquierda Unida, se realizaron por parte de Intervención Municipal «por la cantidad de papeles revueltos y tirados por el suelo en la misma sala de los funcionarios a la mañana siguiente, sala que suele estar abierta de forma permanente confiando, claro está, en que la puerta de acceso al Ayuntamiento permanece cerrada fuera de horas de oficina», explica el portavoz de IU Francisco Guarido.

En esa noche, las dependencias municipales estuvieron abiertas desde las nueve hasta las tres de la madrugada y a cargo de un conserje. Es habitual que el Ayuntamiento se abra a los cantantes y grupos las noches que estos actúan en la Plaza Mayor, para que utilicen las dependencias como camerino, «pero de ahí a que el Ayuntamiento se transforme en la casa de tócame roque hay un abismo», considera Guarido.

En respuesta a estas quejas, el concejal de Juventud y Ocio, Víctor López, ha defendido que los artistas utilizan las dependencias municipales «para ahorrar costes. Se ha hecho siempre y ahora con más razón, en estos momentos de crisis». Además, añade que junto al conserje que trabajó esa noche en el Ayuntamiento, «también había agentes de la Policía Local en la puerta», al tiempo que desmiente las quejas de Intervención Municipal por el desorden encontrado en su despacho la mañana siguiente. «Lo que parece molestar a la oposición es que las fiestas de San Pedro hayan sido un éxito con la mitad del presupuesto», añade.

En cuanto a las fotografías en las que Soraya sale tumbada en el salón de Plenos y también junto a un cartel con el logotipo del Ayuntamiento de Zamora, el concejal del área asegura que «las fotos no son subidas de tono» y que estas imágenes «ayudan a dar publicidad a Zamora, ya que la cuenta de Twitter de Soraya es seguida por nada menos que 100.000 personas», argumenta.