La rehabilitación completa del recinto de La Aldehuela, la otrora pujante instalación agropecuaria reconvertida ahora para otros fines, ha entrado en su recta final y estará prácticamente concluida cuando la escuela taller que se encuentra arreglando la antigua casa del director acabe su tarea a mediados del año que viene. Fue el balance realizado por el presidente de la Diputación, Fernando Martínez Maíllo, de visita ayer a las instalaciones, acompañado por los técnicos responsables del proyecto y de la institución provincial.

Maíllo recordó la historia de las instalaciones, dedicadas a centro de capacitación agraria, con edificios muy emblemáticos y queridos en la ciudad. Las instalaciones fueron cedidas a la Diputación y cuando dejaron de utilizarse sufrieron un acusado proceso de degradación, con frecuentes y habituales actos vandálicos. Desde hace tiempo, sin embargo, se está trabajando para recuperar las instalaciones. Ya funcionan las del Centro Rural de Innovación Educativa, en la parte que gestiona la Junta (Educación) y también las del Vivero de Empresas de la Diputación «que está en funcionamiento de manera óptima desde hace algunos años».

A través de sucesivos talleres de empleo que han dado trabajo y formación a 104 trabajadores (el actual es el cuarto, treinta alumnos), Diputación y Junta han invertido 1,8 millones de euros (millón y medio aportados por la autonomía sobre todo en salarios y también en material), para ir recuperando los edificios, que suman 42.000 metros cuadrados. Los alumnos, el 80% mujeres «han encontrado un trabajo durante unos meses y sobre todo una formación de cara al futuro», en especialidades como albañilería, carpintería o jardinería. Además del Vivero de Empresas, hay otra zona utilizada por el servicio de Agricultura. El resto de edificios recuperados «los queremos poner a disposición de la sociedad, para buscar en el futuro los usos más necesarios». Entre ellos, Maíllo mencionó una posible ampliación del Vivero de Empresas o bien «usos culturales, sociales o los que sean precisos para darles la mayor utilidad posible». Entre estos usos, no descartó algún servicio auxiliar del futuro Centro de Ocio y Deporte que se creará justo enfrente, y que en estos momentos está en la fase de «elaboración, diseño y elección de los proyectistas» que van a definir el diseño de esta realización.

En cualquier caso, señaló el presidente provincial, «el objetivo de la Diputación era que estos edificios que estaban catalogados y que tienen un valor arquitectónico importante se pusieran a disposición de los ciudadanos y se rehabilitaran íntegramente». Y en esta rehabilitación destaca también la del antiguo silo, una impresionante sala abovedada que puede servir de sala de exposiciones o actividades culturales. Una obra realizada por una empresa especializada, con 260.000 euros de la Diputación.