- "Vida interior". ¿Eso tiene que ver con cierto espiritualismo, concepciones estéticas, formulaciones intelectuales?

- Me gustó la frase de Wladislaw Tatarkiewicz , escritor que sabe mucho sobre estética del arte, y la utilicé. Porque venía muy al caso de lo que yo planteo en mi exposición, que intenta descifrar, a través de la vida interior, la realidad. Me fijo en aquello que me rodea. Pero también hay que interpretar mi pintura, que tiene unos colores muy singulares. Se trata de una visión subjetiva de mi percepción del mundo, donde recojo lo más cercano a mí.

- Captar la realidad, que es cambiante a cada momento, y expresar el mundo interior. ¿En eso consiste, más o menos, el arte?

- Sí. Todos contamos con una forma especial, muy subjetiva, de captar la realidad. Y el arte sólo se expresa así: poniendo un poco de cada uno. Yo tomo el medio ambiente como mi referencia. Sin embargo, la interioridad resulta más importante para la creación.

- Y expresa la realidad de manera artística y vitalista.

- Es una percepción, sí, de una forma alegre, colorista. Me baso mucho en la mancha a la hora de construir las formas. Más que hacerlo con el dibujo. Y, sobre todo, trato de atrapar la luz del momento que me interesa representar. Es lo más importante. Y, a través de ella, que el cuadro resulte colorista.

- Dicen que existe el placer de escribir. ¿Existe también el placer de pintar?

- Sí. Resulta fundamental que uno se sienta a gusto cuando pinta. Es el momento en el que uno más se relaja y disfruta de lo que hace y también le sirve para conocerte. Todo eso se refleja, después, en el resultado final.

- ¿Y también existe una pintura "fashion": apariencia deslumbrante, pero vacía de casi todo?

- Puede ser. Al final, la interpretación le da un sentido a todas las obras de arte. Siempre se busca, y suele hallarse, un significado a lo que se percibe. En el fondo, sacas algo a todo.

- ¿Vale el "todo vale" ?

- Hay cosas que pueden resultar cuestionables. Sin embargo, se le da una explicación de lo que se quiere transmitir con la obra.

- Si el espectador exclama: "¡Qué querrá decir este artista!..., ¿malo?

- Cierto. Si la obra no transmite nada al espectador, algo ha fallado.

- ¿Crear es entregarse con cuerpo y alma?

- Sí. Se supone que todo lo creado es algo en lo que, primero, se cree firmemente. Constituye algo muy propio, que se realiza por alguna razón. Y puede ser espontáneo. Sin embargo, en última instancia siempre tiene que existir una razón de ser.

- ¿Alcanzar la perfección es como morir?

- No. Lo perfecto es, por el contrario, estar vivo, y disfrutarlo.

- ¿De la vanguardia a la excentricidad o la "boutade" artística sólo hay un paso?

- La vanguardia suele verse, al principio, como una excentricidad. Sin embargo, una y otra no van de la mano, no caminan juntas.

- ¿Puede dibujarse la crisis esa de una pincelada?

- Posiblemente, con un color fuerte. Si con algunos sentimientos de desesperación, de no saber dónde ir, se emplea una pincelada enérgica, que muestra la rabia de la situación en la que nos da encontramos, ¿por qué no? Y podría ser con el negro o con el rojo de pasión febril.

- Hay exposiciones en las que el arte está casi invisible.

- Sí. Puede ocurrir que la calidad no sea tan buena como se quiere, o que interese menos. Puede suceder. Hay exposiciones, cierto, que no tienen mucho interés para el espectador.