La Unión de Pequeños Agricultores (UPA) de Castilla y León denunció ayer, a través de un mensaje en la red social Twitter, la presencia de cinco jabalíes en las instalaciones de la Azucarera de Toro que estaban alimentándose en uno de los montículos de remolacha almacenada. El "tuit" que ha colgado la organización agraria viene acompañado de una imagen con cinco animales comiendo tranquilamente en una de las montañas de raíz Azucarera. Desde la organización advierten del peligro que supone la actual "plaga" de jabalíes para los intereses de los pequeños agricultores y reclaman más medidas a las administraciones regionales que sirvan para poner límites a estos animales.

Aurelio González, secretario general de UPA Castilla y León, afirma que lo ocurrido es fruto de "una superpoblación de fauna salvaje", situación que considera especialmente descontrolada en el caso de los jabalíes. González señala que esta problemática no podrá revertirse hasta que a esta especie no se le declare como "plaga" y se permita a los cotos cazar libremente a los animales sin tener que esperar por la burocracia de la Junta de Castilla y León. El secretario general de UPA considera que la comunidad debe flexibilizar "todavía más" la caza del jabalí. González critica la tardanza de la administración a la hora de facilitar los permisos de batidas para este animal: "el problema radica en que los permisos para cazar jabalíes pueden tardar hasta 30 días".

El portavoz de los pequeños agricultores castellanoleoneses espera que el altercado de la Azucarera de Toro sirva "para remover las conciencias de los políticos" y se implementen medidas "efectivas" para preservar la seguridad y el modo de vida de agricultores y ciudadanos.

Coto de Toro

Las batidas de jabalíes es un asunto problemático en el coto de Toro y que se encuentra enquistados desde hace más de tres años. La mayor parte de la población de estos animales se encuentra resguardada en la zona militar, propiedad del Ministerio de Defensa, de Monte la Reina. Esta zona tiene restringida la caza y los jabalíes la aprovechan como refugio natural. Las conversaciones entre las instituciones regionales y estatales y el presidente de la Sociedad de Cazadores de Toro, José Antonio Melgar, se han sucedido durante los últimos años, pero siempre con el mismo resultado: una negativa por parte de las administraciones.

La situación se ha enquistado de tal manera que Melgar ha llegado a decir que la Junta se está "riendo" de los cazadores locales. La afirmación es una respuesta a la petición de la administración local de incrementar la caza del jabalí. Una exigencia que Melgar considera contradictoria con la reciente negativa de las instituciones a la propuesta de los cazadores toresanos de fijar una serie de puestos en la zona militar que permitiría controlar la población de jabalíes.