Remolacheros de la zona han criticado públicamente las "excesivas trabas" para acceder a una ayuda agroambiental comprometida por la Junta de Castilla y León y que empezarían a percibir durante esta campaña. El responsable del sector remolachero de la Alianza UPA-COAG, Fernando García, explicó que los requisitos que la Administración regional ha impuesto para obtener esta ayuda de 350 euros por hectárea han propiciado que muchos remolacheros se estén planteando renunciar a ella, sobre todo, por la obligación de sembrar remolacha durante cinco años. Otras exigencias planteadas por la consejería de Agricultura y Ganadería para acceder a esta ayuda es que los remolacheros sean titulares de explotaciones agrarias, disponer de un contrato de suministro con alguna empresa azucarera y de superficie de cultivo de remolacha.

Además, los agricultores deben comprometerse a rellenar el cuaderno agroambiental de la explotación, rotar la remolacha una vez cada cuatro o más años, gestionar la explotación de forma sostenible, cultivar leguminosas o realizar análisis de suelo. La exigencia de cumplir todos estos requisitos, según García, ha desanimado a muchos remolacheros que se están planteando no solicitar esta ayuda, lo que repercutirá negativamente en el precio de la remolacha que produzcan. Los cultivadores "no están conformes con tantas trabas", apuntó García, quien destacó además que la organización agraria a la que representa ha presentado alegaciones que, por el momento, "no se han tenido en cuenta". La Junta anunció hace meses que con esta ayuda pretendía contribuir al mantenimiento de un cultivo fundamental en Castilla y León fomentando su gestión sostenible, pero los requisitos impuestos podría propiciar que muchos remolacheros optaran por no solicitarla.

Por otra parte, García se refirió a la campaña remolachera en la Azucarera de Toro y aseguró que, a pesar de las lluvias registradas en los últimos días, no se han registrado problemas a la hora de extraer la raíz. Hasta la fecha, la industria toresana ha recepcionado unas 210.000 toneladas de remolacha, con una riqueza media de 18,1 grados, mientras que el descuento se sitúa entre el 9 y el 10%. En cuanto a los rendimientos por hectárea, García apuntó que, en principio, serán inferiores a los de años anteriores. La Azucarera de Toro fue la primera fábrica de la zona norte en iniciar la campaña de recepción de remolacha. La planta toresana abrió sus puertas el pasado 1 de octubre y, durante la presente campaña, tiene previsto recibir unas 955.000 toneladas de raíz, procedentes de 9.200 hectáreas, 1.300 hectáreas más que en 2014. La campaña se está desarrollando con normalidad ya que, a pesar de las lluvias, los cultivadores no tienen problemas para arrancar la raíz.