Goteras, persianas y ventanas rotas, luminarias sin reponer, o pistas de juego desgastadas. Estas son algunas de las "muchísimas" deficiencias detectadas por el Ayuntamiento en edificios municipales que albergan los tres colegios públicos de Toro. La concejala responsable del área de Educación, Sara Pérez, fue la encargada de exponer ayer la "complicada" situación de los ¡colegios y, entre otras deficiencias, destacó la "falta de luz en las clases y otras dependencias" por la no renovación de medio centenar de fluorescentes.

Otras deficiencias son tazas de wáter rotas y sin cadena, alrededor de 60 persianas estropeadas, e incluso "inexistentes" en algunas aulas, o ventanas que no cierran con el consiguiente gasto de calefacción, pistas de juego desgastadas y goteras que se han empezado a reparar para evitar filtraciones de agua a las dependencias de los colegios.

Tras enumerar estas carencias, Pérez resaltó que el Ayuntamiento ya ha llevado a cabo algunas mejoras, tales como la renovación de las bombas de una caldera de calefacción y la revisión del resto, se han podado ramas de árboles después de detectar que en algunos colegios eran "enormes" y podían provocar situaciones de peligro para los niños, se ha limpiado la arena de los patios y se han dado instrucciones para reparar los urinarios y las cisternas. Otra anomalía detectada por el equipo de Gobierno socialista es que los convenios de colaboración que permiten el uso de determinadas instalaciones de los colegios como pabellones están caducados desde el 2009, con el consiguiente desconcierto para los equipos directivos de los centros que desconocen quién o qué colectivos están autorizados para utilizar las citadas instalaciones.

Por otra parte, Pérez remarcó que aunque la situación económica del Ayuntamiento es "crítica" el equipo de Gobierno se ha marcado como objetivo prioritario acometer mejoras en los centros educativos, en la medida de sus posibilidades, sobre todo para que "los niños no pasen frío". De hecho, ya se ha procedido a llenar las calderas, después de una revisión exhaustiva, para que puedan ser utilizadas en el momento en el que desciendan las temperaturas. Además, la edil socialista reconoció que está pendiente de que se reúna el consejo escolar del centro de adultos para atender también sus peticiones.

Por su parte, el alcalde, Tomás del Bien destacó que, antes del inicio del curso, el Ayuntamiento llevó a cabo una revisión del estado de los centros educativos y que sirvió para elaborar un estudio pormenorizado de su estado y de las mejoras que sería necesario acometer. A este informe se han incorporado las peticiones realizadas por los equipos directivos y consejos escolares de cada centro.

En este punto, el mandatario municipal, señaló que, el Gobierno local conferirá prioridad a la reparación de desperfectos y que, como remarcó, son la consecuencia de "muchos años de abandono, pasotismo y falta de diálogo con los equipos directivos". Aunque no concretó el gasto que para el Ayuntamiento de Toro supone el mantenimiento de los colegios, Del Bien reconoció que es "elevadísimo", lo que unido a la complicada situación económica de la entidad local, conlleva importantes limitaciones a la hora de acometer mejoras.

Ante esta situación, el alcalde reiteró públicamente la petición que ya formuló recientemente en una reunión mantenida con el delegado territorial de la Junta de Castilla y León, Alberto Castro, y basada en la necesidad de que la Administración regional, a la que corresponden las competencias en Educación, se implique más en el mantenimiento de los colegios. Por otra parte, Del Bien reconoció que uno de los principales problemas que presentan los colegios de la ciudad es su antigüedad, aunque aseguró que el Ayuntamiento intentará, poco a poco, subsanar todas las deficiencias detectadas. Un grupo de madres de alumnos de los colegios públicos asistieron ayer a la rueda de prensa en la que se hizo pública la situación de los centros y planteó la posibilidad de que las asociaciones de padres se coordinen con el Ayuntamiento para reclamar ayudas para el mantenimiento de los centros.