Un ataque de lobos registrado la pasada madrugada en una explotación ganadera de Villalonso se ha saldado con la muerte de 32 ovejas, aunque otros 20 ejemplares han resultado heridos. Miguel Ángel Marcos, ganadero que gestiona con sus dos hermanos la explotación, confirmó que, como consecuencia de este ataque, 18 ovejas fallecieron durante la madrugada, mientras que otras 14 murieron en la mañana de ayer por las heridas provocadas por los lobos. El ataque se produjo sobre las cinco de la mañana, hora que recogieron las imágenes grabadas por las cámaras de seguridad que fueron instaladas en la explotación para evitar robos, imágenes que también han desvelado que fueron dos los ejemplares de lobo que ocasionaron la muerte a los animales.

Destacó Marcos que aunque esta explotación ganadera ha sufrido otros ataques de lobos, el registrado en la pasada madrugada "ha sido el peor", tanto por el número de ovejas muertas como por las heridas que sufren otros ejemplares, ya que presentan mordiscos que llegan hasta el hueso e incluso a algunas ovejas les han arrancado las ubres.

Al margen de las ovejas muertas, Marcos señaló que las consecuencias de este nuevo ataque de lobos podrían haber sido peores, ya que un grupo de esquiladores se encontraba durmiendo en una nave de la explotación cuando los lobos accedieron a su interior y "han pasado a escasos diez metros de los esquiladores". De hecho, como apuntó el ganadero, los esquiladores han decidido no pasar una noche más en el interior de la explotación por si se producen nuevos ataques de lobos.

En la mañana de ayer, técnicos de la compañía de seguros se desplazaron hasta Villalonso para peritar los daños aunque, como subrayó el ganadero, "por aquí no ha aparecido nadie de la Junta". Además, destacó que, desde que la explotación comenzara a funcionar en el año 2000, al menos, "hemos sufrido 15 ataques, pero el último ha sido el peor". Este ganadero de Villalonso reclamó públicamente que se busquen soluciones para evitar nuevos ataques de lobos ya que, en las explotaciones ocasionan importantes daños que no se cubren con la indemnización que reciben los ganaderos que cuenten con un seguro. Asimismo, solicitó a los "ecologistas" que "aporten soluciones porque son ellos los que están protegiendo a los lobos".