De toda la bazofia que he observado estos días acerca del ya cansino tema catalán, hay algo que no puedo tolerar ni digerir y lo intentaré cagar aquí: chavales embrutecidos en las calles por una causa política. "Niños plantándole cara a la policía" no es ya una asignatura optativa en los colegios catalanes, sino obligatoria. Profesores y padres que mandan a sus niños a defender una causa política absurda, para justificar las deudas de los señoritos del cortijo, no tengo la menor duda que le entregarían un fusil y les mandarían a una batalla para satisfacer la oligofrenia independentista. No quiero ni pensar en la clase de monstruos en que se convertirán esos chavales cuando crezcan. ¿Qué podemos esperar? ¿diálogo, paz, empatía, humanidad, cooperación o solidaridad? siento desprecio por esos padres y esos profesores, desprecio absoluto por quien convierte a sus hijos y estudiantes en auténticos yihadistas, cordobeses que como el hijo de la Tomasa juren venganza en el futuro cuando el proceso se quede atascado. España debe permanecer alerta con estos niños que perdieron la virginidad de la inocencia actuando como escudos humanos. Muchos padres estarán orgullosos de ello, pero tarde o temprano su atroz error se volverá contra ellos. Unos se convertirán en bestias y las bestias encuentran en la familia sus primeras víctimas. Otros, al crecer, se darán cuenta de su error y se lo recriminarán a sus padres ¿pero y los profesores? cómo semejantes seres humanos -por denominarlos de alguna manera- pueden ser mis compañeros de profesión. Y el chaval que no vaya a la manifa ¿lo aprobarán? ¿les dará mayor puntuación a los aborregados? ¿es eso libertad? no, eso no es libertad. Libertad es poder investigar y transmitir el conocimiento, libertad es enseñar en el librepensamiento y no usar a tus alumnos como carne del cañón para satisfacer a quien dice pagar tu sueldo ¿Alguien se imagina a un médico mandando a sus pacientes a la causa como moneda de cambio? qué lo haga un cura con sus feligreses, puede pasar?pero un maestro no, jamás ¿dónde queda su código deontológico? ¿a tanto hemos llegado para poner al sistema educativo al servicio de una causa política? Ni en la guerra civil los maestros cayeron tan bajo, ni en Siria, ni en ningún conflicto armado o pacífico ningún docente ha llegado a tal extremo, antes das la vida por tus estudiantes que prostituirlos. Tu trabajo es enseñarles a pensar libres, no adoctrinarlos.

¿Y en las Españas? por favor, salen los perrofalutas de Podemos y los acomplejados frustrados de Izquierda Unida justificando el independentismo, o en su caso, un trato de favor para Cataluña. Pero ¿qué mierda de izquierda son dos partidos políticos que favorecen al rico a costa del pobre? porque en este juego, el rico es Cataluña (no se hartan de decirlo ellos mismos) y los pobres los demás que les robamos. Soy de izquierdas y dáis grima, ni os reconozco como izquierda ni tenéis ni puta idea del mensaje de Marx del que tanto se os llena la boca. La clase rica catalana, azuzando al pueblo y vosotros no sólo estáis de acuerdo, sino que lo justificáis. Y todavía acusáis a los españoles de a pie (trabajadores, agricultores, ganaderos, autónomos) a los que decís representar, de que oprimen a los catalanes.

Pero luego están los artistas, intelectuales, foreros y demás pagafantas, gente en definitiva con menos personalidad que Melania Trump, y que viviendo fuera de Cataluña todavía critican a los españoles que no están(mos) de acuerdo.

Me duele que muchos a los que nos gusta España hayamos tenido que emigrar mientras tanto vago inconformista se quede chupando del bote y del voto en ella. Joder, si no os gusta la mierda de España, os cambio el puesto, o al menos decid qué clase de país queréis porque ni todos somos peperos, ni todos somos monárquicos ni todos somos corruptos ni a todos nos gustan los toros, cantinela con la que os acostáis y os levantáis.

Volviendo a Cataluña, no es una independencia, no es una autodeterminación, no se trata de un referéndum, no se trata de un sentimiento, ni de una lengua que defender ni de una cultura identitaria; se trata de una región autónoma feudal donde cuatro señoritos enrocados juegan al ajedrez con sus peones, y en vez de aprovechar, para entre todos darle jaque mate al último reducto medieval de Europa, lo justificáis y lo defendéis los mismos que rememoráis la revolución francesa como gran causa y clamáis por guillotinas. Sin embargo, intuyo, que no tenéis ni idea de lo que significó ni significa: libertad, igualdad y fraternidad porque lo que hoy hay en Cataluña es: feudalismo, desavenencia y odio y ni yo ni los españoles lo hemos creado.

Sé que muchos me llamaréis fascista por no pensar como vosotros o por llevaros la contraria, pero si esto es ser fascista soy un fascista convencido y que viva el fascismo; y si lo vuestro es una revolución, pues que puta mierda ¿no? Pero no, yo no soy un fascista, vosotros sois los fascistas: los políticos que señalan, los oligarcas que amenazan, los maestros que aborregan y marcan, los padres que lanzan a sus hijos a la yihad como lo hizo Hitler cuando los rusos entraban a liberar Berlín, y los pagafantas españoles que le bailan la cántara.