El pasado domingo, dentro del programa de la Fiesta en honor de nueva patrona, la Virgen de la Concha, el salón de plenos de nuestro ayuntamiento vibró con esa emoción, de lo sincero, de lo sencillo, de lo que fuera de la preparación y del protocolo, tiene la fuerza de lo sincero, de lo que brota de lo más hondo y recio de la personalidad humana, cuando el motivo lleva esa carga emotiva, que brota de lo más hondo de la personalidad humana, cuando esta encierra esos valores universales de la entrega, la amistad, el reconocimiento y lo avala la autoridad. La entrega a la Asociación Cultural Tradición y Música Popular de la medalla de la cofradía Virgen de la Concha por sus veinte años de entrega generosa a promocionar con eficacia y gracia los más representativos valores de nuestra tradición histórica y popular, hace levantar oleadas de efectos de emoción y de reconocimiento. Junto a este hecho concreto, las palabras de presentación de nuestra alcaldesa abrieron, como siempre, esa puerta a lo grande, a lo sincero y a la emoción, y la ausencia del presidente de la Cofradía, el entregado y sincero presidente Conrado Eguaras Blanco, cargó la emoción que nos alivió con su lectura su sucesor, Florián Ferrero, que durante décadas, desde su más temprana juventud ha sido un sincero y fiel seguidor de esa tradición de la Concha y al que hemos visto muchas veces desarrollar con elegancia y precisión el «Baile de la Bandera» como los más preciados especialistas. La lectura de las palabras del presidente Conrado, ausente por motivos de salud que lamentamos y hacemos votos por su rápida mejoría llenó el salón de ese ambiente tenso que hacía más emotivo el acto y calaba más hondo en el semblante de los asistentes. El acto breve y sencillo con las palabras de agradecimiento del presidente de la asociación, Fabio Morchón, dejó bien claro por su brevedad y precisión, que el agradecimiento formaba parte de su entrega permanente a su labor y en cada caso y en cada momento las festividades de la Patrona y de los actos que la ciudad a través de su Ayuntamiento organice. Siempre la tradición, la emoción de los recuerdos del pasado y los detalles en cada caso estará los miembros al frente llenando con su música su organización y su indumentaria como testimonio de fidelidad, reconocimiento y respeto.

En el salón de Plenos con las palabras de nuestra alcaldesa y los últimos aplausos se dio fin a un emotivo acto de reconocimiento, de afecto y de recuerdo a un hombre y a una asociación que ha marcado un hito en la historia de las tradiciones de nuestra ciudad.

Gracias, Rosa, por este emotivo, sincero y reconocimiento a la labor de un hombre Conrado Eguaras y a una Asociación Tradición y Música Popular en la persona de su presidente.