Rafa Nadal ya está en los octavos de final del Abierto de Australia, primer "Grand Slam" de la temporada, después de mostrar otra vez muy buen nivel en su partido de tercera ronda ante el bosnio Damir Dzumhur, del que se deshizo por la vía rápida en tres sets por 6-1, 6-3, 6-1.
El balear sigue dando pasos adelante en su tenis y lo va a afinando para cuando lleguen obstáculos de teórico mayor peligro. De momento, en su camino hacia los cuartos de final le espera el argentino Diego Schwartzman, al que ha derrotado en sus tres anteriores enfrentamientos y sin ceder un set.
Después de solventar sin problemas sus encuentros ante el dominicano Estrella y el argentino Mayer, el manacorí también despachó sin un excesivo gasto de energía (una hora y 50 minutos) al jugador balcánico, primer cabeza de serie (28) al que se medía en la cita.
El bosnio, pese a su victoria en 2016 en Miami ante el balear, que entonces abandonó en el tercer parcial, no tuvo en esta ocasión argumentos para frenar al número uno del mundo, nuevamente firme con el saque. Eso sí, Nadal estuvo algo más errático con el "drive" y no tan demoledor desde el fondo de pista como en él suele ser habitual.
