Se ha hecho con un nombre en el mundo del ciclismo por méritos propios. Es uno de los jóvenes valores que pisan fuerte y ha tenido la valentia y, sobre todo, las piernas para batir a Vincenzo Nibali. Jaime Rosón se prepara para la Vuelta a Castilla y León donde parte como uno de los posibles ganadores en su segunda temporada en el pelotón internacional y con su segunda victoria como profesional ya en el bolsillo.

-¿Cuál es tu valoración de esta primera parte de la temporada?

-Es para estar muy contento. En esta primera parte de la temporada me marqué el objetivo de ganar una carrera y una Vuelta. La carrera la conseguí y la Vuelta la tuve muy cerca y se escapó muy poco. He conseguido este año tener una regularidad que no conseguí tener el año pasado no tuve al ser mi primer año. Este año en todas las carreras en las que he competido he acabado entre los 15 primeros, así que es para estar satisfecho.

-¿En qué ha cambiado este año Jaime Rosón?

-Sobre todo tengo la cabeza más hecha para los esfuerzos y he ganado en fondo físico. Correr el año pasado la Vuelta a España me ha dado un toque de calidad extra que antes no tenía y creo que se está demostrando en cada carrera.

-Hablaba la prensa especializada, durante el Tour de Croacia, de que eras un corredor muy inteligente. ¿Qué piensas de ello?

-Bueno eso tienen que decirlo ellos, yo hago lo que está en mi mano. Es cierto que en ocasiones puedo tener una buena visión de carrera pero a veces fallo.

-¿Qué sentías cuando estabas luchando rueda a rueda con Vincenzo Nibali, todo un ganador de las grandes vueltas?

-La verdad es que al principio tenía una sensación bastante extraña porque yo nunca me había batido con un ciclista de tanta calidad, con un corredor tan importante, pero después empiezas a llevarlo con naturalidad porque para eso habíamos estado trabajando muchos meses muy duro. He hecho muchos viajes a Béjar para poder tener estas condiciones y creo que este es el camino a seguir para poder luchar con otros corredores de su misma talla en el futuro.

- Y además de luchar contra Níbali, llega la victoria. ¿Que se siente en ese momento?

-Una alegría increible. Llevaba un mes sintiéndome muy bien y sabía que no se me podía escapar la victoria. Fue una liberación para mi porque tres días antes quedé segundo por muy poco. El equipo confió en mi y fue una alegría doble por ponerme líder y poder batir a Nibali.

-La última carrera de esta primera parte de la temporada es en casa, en la Vuelta de Castilla y León. El pasado año una bonita lucha contra un gran dominador como Alejandro Valverde, y este año una vuelta que se decidirá a una carta en La Camperona. ¿Cuáles son las sensaciones a unos días del inicio de la prueba?

-Ahora vamos a ver que tal recupero porque el cuerpo ya me está pidiendo un descanso, está siendo una temporada muy larga para mí, manteniendo mucho tiempo la plena forma y estoy algo cansado. Si recupero bien y tengo buenas sensaciones lucharemos por disputar la Vuelta a Castilla y León.

-La victoria en Croacia, además de otras buenas clasificaciones en las distintas etapas en las que has competido te colocan como mejor sub-26 español y el séptimo mejor ciclistas nacional en lo que se lleva de calendario UCI, ¿Es esto un impulso más para seguir?

-Sí, por supuesto. Es el camino a seguir para que la gente vea que los jóvenes españoles tenemos futuro en este deporte, que hay relevo a la generación de Contador, Purito y Valverde.

-¿Esta generación joven que viene puede hacer recobrar la ilusión del aficionado cuando se retiren Contador y Valverde?

-Yo creo que sí, hay una hornada muy buena de ciclistas jóvenes, encabezada por Mikel Landa o David de la Cruz, que tienen todavía mucho ciclismo por delante y creo que viene una generación a la que hay que darle paciencia porque los españoles solemos explotar más tarde al no estar acostumbrados a competir al máximo nivel desde pequeños. Hay que esperar a que el cuerpo se vaya habituando a la categoría y después llegarán éxitos.

-Tras la Vuelta a Castilla y León llega el momento de descansar y preparar la segunda parte del calendario. ¿El objetivo es mejorar los resultados en la Vuelta a España?

-Si, descansaré diez días ya con vistas a la segunda parte de la temporada con el objetivo de alcanzar un buen momento de forma y poder ir a la Vuelta a España. Luego allí, por supuesto que intentaré mejorar los resultados del año pasado, hacerlo lo mejor posible y luchar por alguna etapa. Creo que este año estoy más capacitado física y psicológicamente así que daremos la talla.

-¿Cómo ves el futuro del ciclismo zamorano?

La realidad es que las categorías inferiores aquí en Zamora están un poco mal, ha descendido el número de equipos y sólo espero que alguna empresa o algún pueblo puedan crear de nuevo alguna escuela, que se apunten muchos niños como en la época en la que estaba yo. Al final si hay muchos chicos practicando un deporte alguno siempre sobresale.

-¿Cómo se siente un ciclista cada día que sale a entrenar viendo que el problema de los atropellos no cesa e incluso aumenta?

-Yo intento no pensar en ello porque si lo piensas no sales a entrenar. Salgo a hacer mi trabajo y esperando que los coches que pasan nos dejen al menos un metro y medio al adelantar.

-¿Atropellos como el de Froome, o el que acabó con la vida de Scarponi, pueden conseguir que esta lacra sea más visible y se conciencie a los conductores?

-El ejemplo más claro ha sido el de Michelle Scarponi que falleció el día que yo gané en Croacia y es una auténtica pena que se pierda así una vida. Hay que cambiar las leyes, hacerlas más duras porque es un asesinato de una persona, no es una imprudencia. Se han creado diversas plataformas para conseguir que la ley cambie y espero que esto siga adelante y que se pueda llevar a cabo.