El jugador del Barcelona Javier Mascherano ha admitido en sede judicial haber defraudado 1,5 millones de euros correspondientes a los ejercicios fiscales de 2011 y 2012. Acompañado de su abogado, el jugador comparecía ayer en el juzgado de instrucción número 9 de Gavà (Barcelona) para declarar como imputado por dos delitos de fraude fiscal, que ha reconocido haber cometido. Por lo tanto, no ha sido necesario interrogar al jugador, que hace unas semanas ya devolvió los 1,5 millones defraudados (587.822 correspondientes al ejercicio de 2011 y 968.907 al de 2012), más otros 200.000 de intereses.

Según la fiscalía, Mascherano usó dos estrategias: no declarar las rentas obtenidas de uno de sus sponsors (Nike) a través de una sociedad domiciliada en Miami (USA) y simular la cesión de sus derechos de imagen a una entidad instrumental radicada en Madeira (Portugal).

Pese a haber admitido los hechos, el proceso judicial deberá ahora seguir su curso y la jueza López dictará un auto de apertura de juicio oral. El jugador se enfrenta a penas de uno a cinco años por cada delito fiscal y a una multa que puede hasta sextuplicar la cantidad defrauda. Sin embargo, es más que probable que el caso no llegue a juicio y que se dicte una sentencia de conformidad, ya que el defensa barcelonista ha admitido los delitos, devuelto la cantidad defraudada con intereses y podría haber pactado con la fiscalía.