La Reina Sofía aseguró ayer, tras visitar al Rey después de la intervención en la que se le extirpó un nódulo benigno en el pulmón derecho, que don Juan Carlos tiene «una salud impresionante», y se confesó «feliz» por el éxito de la operación. La Reina se mostró muy cordial con los medios de comunicación y, en tono distendido, comentó que el monarca está «muy bien, descansando», y que prevé que tenga el alta en «cuatro o cinco días».

Doña Sofía admitió que estaba «preocupada» por ese nódulo, que se ha confirmado que es benigno, pero añadió: «Estoy bien, feliz, ahora que ha pasado todo». Comentó que el Rey está «muy bien de ánimo», porque «eso no lo pierde nunca», y precisó que, desde que se despertó tras la intervención, no ha ingerido alimentos (posteriormente, el último parte médico hablaba del inicio de una «dieta líquida bien tolerada y la fisioterapia respiratoria habitual»).

La Reina, que incluso se fotografió con los periodistas que habían acudido al Hospital Clínico para interesarse por la salud de don Juan Carlos, confirmó que en los próximos días el Rey recibirá más visitas de su familia.

Doña Sofía abandonó el centro sanitario junto a la Infanta Elena pasadas las ocho y media de la tarde. La Infanta -que había llegado hacia las seis- comentó que su padre está bien y «muy animado», y se mostró muy sonriente junto a la Reina al saludar a los curiosos que las despidieron a la puerta del Clínico. Ambas pasaron la noche en Barcelona.