Gallegos del Pan viene a sumarse a los pueblos que han instalado una planta de ósmosis inversa para suministrar agua potable a la población. La obra ha sido sufragada con fondos propios del municipio y la inversión asciende a unos 4.000 euros, según precisó ayer el alcalde del municipio, Álvaro Martín Temprano. El regidor justificó este servicio para evitar los problemas que sufre la población especialmente en las fechas veraniegos por motivos de cloruro y fluoruro en el agua.

Gallegos del Pan se abastece de un pozo de sondeo con una profundidad de 150 metros. La presencia de los contaminantes en los acuíferos va en aumento y crece el listado de pueblos que deben recurrir a la potabilización de las aguas del sondeo. Aquona explicó ayer a los vecinos el funcionamiento.