Villalcampo se mantiene como el pueblo de Aliste, Tábara y Alba, comarca de origen de la raza zamorano-leonesa, con más burros y burras. Uno de sus ganaderos más representativos es Adolfo Garzón San Miguel siempre vinculado a la especie desde niño y "hasta que me muera porque forman parte de mi vida". Sin embargo el ganadero con más ejemplares es de Villardondiego, Jesús de Gabriel Pérez, -el ha sido uno de los grandes artífices de recuperar la raza-, con 36 ejemplares: 18 burresas del proyecto "Recría", 17 burras nodrizas y 1 semental. Dado que para acceder a la subvención era requisito imprescindible, en el caso de las burras, haber parido en 2015, ello supone que también fue él mayor productor con 17 crías.

Entre los propietarios de burras hay personas de diferentes profesiones, uno de ellos el famoso cocinero zamorano Cecilio Lera Blanco, de Castroverde de Campos, con dos nodrizas, y Consuelo Gabella Gabella, de Domez de Alba y alcaldesa del Ayuntamiento de Gallegos del Río, con dos burresas, una burra y un semental. Mención especial para el que ha sido nombrado mejor ganadero de la raza los últimos años, Demetrio Fernández Carbajo, cuyas burresas, nacidas y criadas en Gallegos del Río, son las más preciadas cada año en la Feria de San Vitero. El futuro de la raza pasa inevitablemente por los sementales y por ello apuesta la asociación Aszal, siendo de su propiedad 11 de los sementales subvencionados.

Las ganaderías subvencionadas están obligadas a "una producción ganadera sostenible y respetuosa con el Medio Ambiente procurando una condiciones adecuadas de higiene y bienestar animal y fomentar la conservación y mejora de la raza".