Los Ayuntamientos de Granja de Moreruela, Manganeses de la Lampreana y San Cebrián de Castro solicitarán por escrito a la Junta de Castilla y León una ampliación de la frecuencia del transporte a Zamora en las localidades de Granja, Riego del Camino y Fontanillas de Castro, que actualmente es de dos servicios diarios de lunes a viernes y ninguno los sábados y domingos.
Los tres alcaldes descartan ya volver a contar con los ocho servicios que ofrecía la empresa de autobuses Hermanos Vivas Santander al pasar por estos pueblos de camino a Benavente, pues entienden que "no se puede ir contra una sentencia firme del Tribunal Superior de Justicia", la que anuló el acuerdo de esta línea con la concesionaria del servicio, Santiago Castaño Fernández. La nueva estrategia, en consecuencia, pasa por conseguir que la segunda empresa amplíe el actual servicio, "que es muy precario", coinciden los munícipes.
Esa fue la principal conclusión a la que llegaron tras reunirse con el delegado territorial de la Junta en Zamora, Alberto Castro, para pedirle explicaciones por las causas que han llevado a la pérdida del servicio y solicitarle una solución para los usuarios. Castro, en declaraciones a este periódico, explica que los representantes municipales deberían "pedir algo razonable", una frecuencia de servicio mayor de la ahora existente pero que pueda ser asumible por la empresa. En cualquier caso, la Junta tendrá que mediar entre ambas partes ya que se trata de una línea subvencionada al ser deficitaria, una concesión administrativa.
El delegado reconoce que la Junta fue la que instó en 2011 a las empresas Hermanos Vivas Santander y Santiago Castaño Fernández a llegar a un "pacto entre caballeros", el acuerdo que más tarde anuló el TSJ y que permitía a los autobuses de Vivas recoger viajeros en Fontanillas, Riego y Granja, "se hizo a petición de estos pueblos, que querían un mejor servicio, pero las dos empresas estaban de acuerdo en ese momento, a Santiago Castaño Fernández se le permitió a cambio parar en Roales y Montamarta". Santiago Castaño Fernández recurrió el acuerdo a los tribunales un año después de firmarlo, Castro desconoce "qué cambió a lo largo de ese tiempo, puede que simplemente no le salieran los número", pero recuerda que en cualquier caso "hay que entender que probablemente lucha por sus intereses, además la ley le ampara", y que la Junta está obligada a hacer cumplir una sentencia judicial.
El tribunal resolvió el recurso en octubre, y el mes pasado Fomento ordenó que Vivas dejara de parar en estos tres pueblos. Castro anuncia que próximamente se anulará también la segunda parte del acuerdo, y Santiago Cataño Fernández no podrá seguir recogiendo viajeros en Roales y Montamarta, como han solicitado los hermanos Vivas.
En cuanto al diseño de las líneas, Castro no conoce por qué los tres pueblos, situados en la Ruta de la Plata, están incluidos en la línea a Villanueva y no en la de Benavente, "no puedo explicar quién lo diseñó, pero estoy seguro que tiene que tener un sentido, se buscan equilibrios entre las líneas".
